El Instituto Nacional de Transparencia (INAI) sufrió más de 2 millones y medio de ataques a su base de datos en 2020, sin que ninguno afectara al organismo, lo cual demuestra la importancia de que las entidades gubernamentales destinen recursos suficientes a la protección de los datos personales que manejan, indicó el comisionado Óscar Guerra Ford.
Al participar en el último día del foro La protección de datos personales como eje para relanzar una estrategia nacional de ciberseguridad, Guerra detalló que en 2020 el INAI recibió 2 millones 592 mil “peticiones maliciosas” –provenientes en su mayoría de Estados Unidos, México, Singapur y Países Bajos– que buscaban vulnerar las plataformas del instituto, sin que éste sufriera ningún daño.
Subrayó que la rotación de personal en las entidades de gobierno, la falta de capacitación y las restricciones presupuestales ponen en riesgo al organismo y la información de la ciudadanía.