Trabajadores del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro denunciaron que hospitales contratados por ese organismo para que reciban atención médica, como el sanatorio Durango y los institutos nacionales de salud, se han negado a prestar ese servicio debido a que no se ha cumplido con el pago correspondiente al servicio.
En un comunicado, los afectados aseguraron que por ahora son enviados a “clínicas de dudosa calidad profesional y de higiene”, y en otros casos los obligan a realizar el pago de esa prestación con la promesa de hacerles el rembolso en cuanto se pueda, gastos que en muchos de los casos el trabajador no puede erogar.
Ante esa situación, exigieron a la dirección general del organismo, encabezada por Florencia Serranía, que se cubran los adeudos por el servicio médico que tienen con los prestadores de servicios, los cuales se mantienen desde 2019, pues de lo contrario realizarán paros hasta ser atendidos.
Señalaron que los directivos se han negado a cumplir y respetar los derechos de los trabajadores al no ejercer los recursos económicos destinados para el cumplimiento de sus obligaciones laborales.
Derechos coartados
Además de la atención médica y hospitalaria, detallaron que dentro de sus prestaciones tienen que contar con comedores, suministro de medicamentos y ropa de trabajo.
“Frente a estos acontecimientos, la directiva de nuestro gremio y los órganos de gobierno sindical hemos actuado con responsabilidad y cautela en estos tiempos de contingencia para no afectar el servicio de transporte que brindamos a la población.”
Sin embargo, ante la negativa del STC “de presentarnos propuestas de hospitales que nos brinden servicios de igual o mejor calidad a los que teníamos, nos están obligando a decidir acciones de lucha en defensa de los derechos de nuestro gremio”, advirtieron los quejosos.