La Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma de Nuevo León (OSUANL) empezará este jueves sus actividades de 2021 con su tradicional Concierto de Año Nuevo, que debido a la pandemia, como ocurrió gran parte de 2020, será con la agrupación dividida en ensambles, repertorio de música de cámara y bajo el formato de videograbaciones digitales.
El programa -transmitido a partir de las 20 horas por las páginas de Facebook y Youtube de la OSUANL, así como en www.facebook.com/CulturaUANL- estará conformado por Gavota, de Manuel M. Ponce, en versión para cuarteto de cuerdas, así como el Concierto para oboe y violín BWV 1060R y el aria de la Suite orquestal número 3 de Bach.
De igual forma, cinco piezas para dos violines y piano de Dmitri Shostakovich; la Suite Holberg, de Edward Grieg; y Oblivión, de Astor Piazzolla, de quien este año se cumple el centenario de su natalicio y que por dicho motivo será celebrado a lo largo de estos 12 meses por la OSUANL.
Sobre esta última pieza, el director de la agrupación, Eduardo Diazmuñoz, recordó que su título significa olvido y que su inclusión en este primer concierto es muy importante porque es una invitación de la orquesta universitaria a olvidar el 2020.
“Ha sido un año que nos ha marcado por pérdidas, tragedias, cambiar nuestro estilo de vida por quién sabe por cuánto tiempo. Esta es una manera de decirle al público, a través del mensaje hermoso y nostálgico de esa obra, que hay pasar la página y olvidar”, destacó en conferencia de prensa virtual.
Acompañado por el violinista Daniel Dimov, concertino de la orquesta, Diazmuñoz, indicó que la pandemia ha implicado adecuar la dinámica de trabajo de la agrupación desde el año pasado y que se encontró que la mejor forma fue dividirla en pequeños ensambles, tríos, duetos e incluso solistas, para hacer música de cámara.
Aceptó que en su caso no ha sido sencillo este desafío, debido a que no es muy conocedor de la música camerística, por lo que le ha costado que la programación mantenga cierta cohesión y balance. Empero, se dijo satisfecho porque de los 24 programas del año pasado, sólo dos fueron de “tutti frutti y no tuvieron pies ni cabeza”.
En ese sentido, agradeció el compromiso y la solidaridad de los integrantes de la OSUANL, por participar en la integración de los programas a través de sus propuestas y permitirle así incrementar su conocimiento de ese género.
No todo ha sido oscuridad en estos tiempos de crisis sanitaria para esa agrupación universitaria, aseguró Daniel Dimov, pues el confinamiento y la imposibilidad de reunirse ha impulsado a sus músicos a estudiar más tiempo y con mayor ahínco, además de enriquecerse con la búsqueda y la interpretación de obras de cámara.
Ese es un género al que no pueden dedicarle mucho tiempo en circunstancias normales y que los ha motivado a formar pequeños ensambles con atrilistas con los cuales no trabajan de manera habitual, aclaró.
“Cuando volvamos a juntarnos será maravilloso --agregó Diazmuñoz--, porque no sólo los músicos no han perdido su forma, sino que la han superado”.
🎻 Esta semana nuestra Orquesta Sinfónica de la UANL nos presentará el #estreno de su concierto de Año Nuevo. Sigue la…
Posted by Cultura UANL on Tuesday, January 26, 2021