Bagdad. Dos hombres se hicieron estallar en un atestado mercado de Bagdad, lo que provocó al menos 32 muertos y 110 heridos en el primer ataque suicida perpetrado en Irak en tres años, informaron las autoridades, que especularon que podría tratarse de una posible señal de reactivación del Estado Islámico (EI).
Estados Unidos, Rusia, la Unión Europea y el papa Francisco condenaron el ataque revindicado por el EI a través de la agencia de noticias del movimiento, Amaq, en su canal de Telegram.
Periodistas de Reuters, que llegaron poco después de las explosiones, vieron charcos de sangre y zapatos tirados en el mercado de ropa ubicado en la plaza Tayaran, en el centro de la capital.
“Llegó uno de los atacantes suicidas, se tiró al suelo y empezó a quejarse de que le dolía el estómago y acto seguido presionó un detonador. Estalló de inmediato. La gente que pasaba cerca quedó hecha pedazos”, aseguró un vendedor ambulante.
Los atentados, que solían ocurrir a diario en Bagdad, habían desaparecido en los últimos años, desde que los yihadistas del EI fueron derrotados en 2017, como parte de una mejora en la seguridad que había devuelto la vida normal a la capital iraquí.
“Grupos terroristas del Daesh (acrónimo en árabe con el que se conoce al EI) podrían estar detrás de los ataques”, declaró a la prensa el jefe de Defensa Civil, Kadhim Salman. Horas después el EI se atribuyó el ataque.
Un video grabado desde una azotea, y que circulaba en redes sociales, pareció mostrar la segunda explosión. Imágenes compartidas en Internet y que no pudieron ser verificadas de forma independiente por Reuters mostraron varios muertos y heridos.
El atentado ocurrió en el mismo mercado que fue golpeado en el último gran ataque en enero de 2018, cuando perecieron al menos 27 personas .
El primer ministro iraquí, Mustafa Kadhimi, convocó de inmediato a una reunión con los altos mandos de seguridad para analizar los atentados. Fueron desplegadas fuerzas policiales y se bloquearon carreteras para impedir posibles ataques.