El plan de reactivación económica presentado el martes por la secretaria de Economía, Tatiana Clouthier, tiene buenas intenciones, aunque es un conjunto de acciones que llega muy tarde y es “insignificante” tanto en número de créditos como en recursos a distribuir, señalaron especialistas.
La estrategia presentada por la funcionaria está dividida en cuatro ejes que buscan incentivar el mercado interno y el empleo. El paquete incluye 60 mil créditos a la palabra, de 25 mil pesos cada uno, que representan una derrama de aproximadamente mil 600 millones de pesos.
Para Alfredo Coutiño, director para América Latina de la firma de análisis Moody’s Analytics, el plan llega en un momento en el que ya ha muerto una gran cantidad de micro y pequeñas empresas a causa de la pandemia, además de que el monto total a distribuir por medio de microcréditos es “insignificante” respecto del tamaño de la economía.
Tomando en cuenta que un punto del producto interno bruto de México equivale a aproximadamente 270 mil millones de pesos, los mil 600 millones de pesos ofrecidos en microcréditos en el nuevo plan representan sólo 0.006 por ciento. Dicha cantidad, también es muy inferior respecto a los 50 mil millones de pesos que se pusieron sobre la mesa el año pasado, los cuales fueron calificados como insuficientes.
“El programa pretende dar 60 mil créditos, cuando se estima que la mortandad empresarial ha rebasado un millón de negocios”, apuntó Coutiño y agregó que el plan que se requiere para reactivar la economía debe ser mucho más agresivo. De haberse puesto en marcha desde el inicio de la pandemia, es decir, marzo-abril del año pasado, ahora la economía tendría una mejor o menos peor situación empresarial de la que tiene actualmente, afirmó.
Carmen Alcibar, economista en jefe de Grupo Bursamétrica, coincidió en que el plan de reactivación se queda corto, llega tarde y no presenta detalles sobre temas como estímulos fiscales o cómo se pretende incentivar la inversión privada.
José Luis de la Cruz, director general del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), indicó que el plan de reactivación requiere una revisión, dado que sigue la misma estrategia aplicada en 2020, la cual, dijo, no fue favorable, como lo dejó ver el primer reporte del crecimiento económico del país, así como el cierre de más de un millón de empresas. Agregó que el plan debe hacer mayor sinergia con el resto del gobierno federal, los gobiernos estatales y con el sector privado.
El primer plan anunciado por Clouthier es un programa que nace desarticulado porque no se dice cómo se van a lograr esas metas tan ambiciosas, afirmó Ignacio Martínez Cortés, coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Además, no hace alusión al Plan Nacional de Desarrollo, programa que tiene como propósito establecer los objetivos del gobierno a mediano plazo. Si realmente es un plan debieron haber participado los representantes de los sectores productivos del país, así como los titulares de las secretarías del Trabajo, Hacienda, Agricultura y Energía, entre otros, puntualizó.
Sostuvo que el eje que impulsará al mercado nacional es el exportador, principalmente el manufacturero, por la fuerte relación en la cadena global de valor que tiene Estados Unidos en México. “Esto a raíz del fuerte programa fiscal que desde ya está impulsando el presidente Joe Biden”.