En el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se han recibido 713 quejas por aplicación de la vacuna contra Covid-19, de las cuales 184 son en contra de personas que presuntamente “se brincaron la fila” y que no están en la primera línea de atención en los hospitales, informó el director Zoé Robledo.
En conferencia, indicó que las denuncias están en investigación, a fin de determinar si procede algún tipo de procedimiento y sanción.
Del total, 389 quejas han sido presentadas por trabajadores que aseguran ser parte de equipos Covid y no han sido incluidos en las listas de personas que serán vacunadas. Otras 98 son de personal que fue citado para recibir el biológico y no le fue aplicado, indicó el funcionario.
Sobre la atención de la pandemia de Covid-19, Robledo planteó que de manera permanente el IMSS busca más espacios donde se pueda ampliar la capacidad de atención médica. Se cuenta con los recursos económicos, pero “nos puede detener la falta de personal”, admitió.
Recordó que una alternativa ha sido la movilización de trabajadores de entidades donde hay baja transmisión del coronavirus.