Aun cuando consideró que todavía falta que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación resuelva en definitiva si se cancela la transmisión de sus conferencias matutinas a partir del comienzo de las campañas, como lo determinó el Instituto Nacional Electoral, el presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a este organismo detallar los temas relacionados con la democracia a los que sí podrá referirse. “Que se precise, si va a haber censura, que me digan si puedo decir que no se compre el voto, que no se falsifiquen actas, que no se utilice el presupuesto para favorecer a ningún partido”.
Aseguró que esta resolución tiene un destinatario: “es contra nosotros, contra nuestra manera de comunicarnos con la gente. Les molesta la mañanera y quieren silenciarnos, porque si no, ¡imagínense todos los medios convencionales ahora que hasta las redes sociales están optando por la censura! No hay duda de que los medios convencionales no actúan –en su mayoría– con objetividad y profesionalismo (…) Es que hay mercaderes de la comunicación que no ejercen la libertad de expresión, negocian con la libertad de expresión, pero tienen todo el derecho de expresarse”.
A pregunta expresa durante su conferencia, López Obrador consideró que la iniciativa para legalizar el aborto en México “es de la sociedad, en particular, de las mujeres. Vamos a respetar lo que se proponga, pero desde luego existe un mecanismo democrático que es la consulta que podría aplicarse. Que sea un asunto que decidan las mujeres, no las iglesias, no los gobiernos, las mujeres, pero que sea propuesto y promovido por quien lo desee”.
Rechazó que sea un hombre interesado en el dinero y lo material; tampoco en el poder por el poder en sí. El mandatario afirmó que si pasa la prueba de la revocación de mandato, concluirá su vida política en septiembre de 2024.
“Ni líder moral ni cacique político ni opositor, nada de nada. Tiene que haber un relevo generacional”, puntualizó.