La utilización de la capacidad instalada en la industria manufacturera –que aporta una quinta parte del valor de la economía– durante noviembre de 2020 resultó por debajo de los niveles del año anterior, expuso Julio Santaella, presidente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Los datos del organismo exhiben que, mientras en noviembre de 2019 la industria manufacturera operó a 77.4 por ciento de su capacidad instalada, en el más reciente noviembre se redujo a 76.8 por ciento, lo que a su vez se reflejó en una baja del personal ocupado y horas de trabajo.

El Inegi publicó que el personal ocupado por la industria manufacturera se redujo 1.9 por ciento respecto de noviembre de 2019; las horas trabajadas lo hicieron 3.1 por ciento; mientras las remuneraciones medias reales –que han sido impulsadas por los aumentos al salario mínimo– son 1.3 por ciento más altas que el año anterior.

También en cifras desestacionalizadas, el personal ocupado aumentó 0.2 por ciento respecto de octubre de 2020, se redujeron 0.4 por ciento las remuneraciones promedio para sus trabajadores, sobre todo obreros; y las horas trabajadas cayeron 0.5 por ciento. Atadas al mercado de Estados Unidos, las manufacturas son el sector que mejor se recupera de la crisis por Covid-19, según el Inegi.

Sin embargo, únicamente la fabricación de accesorios, aparatos eléctricos y equipo de generación de energía eléctrica libró la crisis por la pandemia de Covid-19, al aumentar las horas trabajadas 6.3 por ciento, en datos originales, y el personal ocupado en 7.4 por ciento; pese a ello, es de las pocas industrias que tuvieron una reducción en los salarios de los trabajadores, ésta de 0.1 por ciento.

Sin caídas ni incrementos en la producción, la fabricación de equipo de computación, comunicación, medición y de otros equipos, componentes y accesorios electrónicos aumentó en 2.4 por ciento el personal ocupado y en la misma proporción las remuneraciones medias.

La fabricación de alimentos, también con una variación nula en sus horas trabajadas, aumentó 0.2 por ciento el número de empleados y 1.1 por ciento las remuneraciones que paga. El resto fueron pérdidas para las industrias a las que da seguimiento el Inegi.

También en Estados Unidos, la capacidad utilizada en las manufacturas muestra recuperación, pero no a los niveles previos a la pandemia.