Madrid. El Barcelona parecía estar en vías de recuperación, el conjunto de Ronald Koeman había vuelto a sonreír tras un irregular inicio de temporada al ligar cuatro victorias, pero la expulsión el domingo de Lionel Messi en la final de la Supercopa española podría lacerar la marcha del equipo azulgrana, cuya directiva “presentará alegaciones” para llegar al menor castigo posible, informó Mundo Deportivo.
Séptimo en la liga al comenzar 2021, el Barça subió a su actual tercera posición, a un paso de Real Madrid y del líder Atlético de Madrid. Messi, de 33 años, también parecía recuperar la alegría sobre el campo, encadenando dobletes frente al Athletic de Bilbao y Granada en sus dos pasados encuentros ligueros, pero la Supercopa de y su expulsión en la final, lo tienen en tensa espera de un castigo.
El astro argentino estuvo en duda hasta última hora por unas molestias físicas, pero saltó al césped el domingo en la final perdida en la prórroga 3-2 ante el Athletic de Bilbao. “Leo venía de una lesión y se notó. En su actuación y en la de todo el equipo”, escribió este lunes el director del diario deportivo catalán Mundo Deportivo, Santi Nolla, en su columna.
“Horrible final para Messi, que jugó a paso de carreta. Quizá no estaba, quizá no debió jugar, pero, ¿quién se lo dice? Su ritmo cansino fue el del Barça”, aseguró el presidente de honor del diario As, Alfredo Relaño. “Sin un plan, sin ideas, sin recursos y, además, sin Pedri, Messi no puede con todo”, remachó el periódico Sport.
En general, la prensa ibérica arremetió contra el argentino por su agresión sobre Asier Villalibre, que le mereció el primer cartón rojo como blaugrana. “Salió del campo de la peor forma posible”, escribió Marca, que le vaticinó mínimo dos partidos de suspensión.
El capitán azulgrana fue expulsado por “golpear a un contrario con el brazo haciendo uso de fuerza excesiva estando el balón en juego, pero no a distancia de ser jugado”, precisa el reporte arbitral. Leo podría ser sancionado entre uno y 12 partidos, dependiendo de la gravedad que considere el Comité Disciplinario de la Federación Española de Futbol.
El castigo se deberá cumplir en los próximos partidos de Copa (el Barcelona juega el jueves) y de la liga en función del número de encuentros que se le impongan.
Una ausencia que, si se alarga, podría frenar la trayectoria ascendente de un equipo muy dependiente del rosarino, quien acaba contrato en junio y aún no ha renovado con un Barça, inmerso en una crisis institucional y dirigido por una junta temporal a la espera de poder celebrar elecciones.
En tanto, el director deportivo del Paris Saint Germain, Leonardo, externó su interés en Messi ante el fin de su contrato con el Barça, pero aseguró que el club galo aún no compite por sus servicios.
“Los grandes jugadores como Messi estarán siempre en la lista del PSG, pero no es el momento de hablar o soñar con esto. No estamos sentados aún en la mesa (de negociaciones); sin embargo, nuestra silla está reservada”, comentó en entrevista con la revista France Football.