Azoteas, estacionamientos propios y aceras son las áreas que desde la tarde de ayer empezaron a ser habilitadas por los pequeños, medianos y grandes restauranteros en la Ciudad de México con la finalidad de reanudar su servicio de consumo de alimentos al aire libre a partir del lunes; de esta manera, buscan cumplir con las nuevas disposiciones de las autoridades por el semáforo epidemiológico rojo.
En un recorrido por las colonias Narvarte, en la alcaldía Benito Juárez; Polanco, en Miguel Hidalgo, y Roma Norte, en Cuauhtémoc, se observó a los trabajadores de diferentes negocios de comida barrer y lavar las nuevas asignaciones, pintar, colocar toldos en superficies anexas a los establecimientos que no cuentan con terrazas o banquetas, así como el montaje de mesas con sombrillas en espacios públicos.
En el restaurante Potzollcalli, ubicado sobre avenida Cuauhtémoc, los empleados lavaron el estacionamiento que se ubica a un costado, colocaron una lona para proteger a los esperados comensales en las ocho mesas en las que darán servicio para cumplir con la sana distancia; en el restaurante de la misma cadena –ubicado en avenida Universidad– se acondicionó la azotea del inmueble donde estarán cuatro mesas.
El director de operaciones de esa cadena, José Manuel Delgado, dijo que en algunas sucursales, además de los 80 platillos a la carta, se ofrecerá servicio rápido como tacos de guisado y aguas frescas, así como el tradicional pozole, distintivo del restaurante.
“Los clientes ya tienen muchísimas ganas de sentarse a comer en los restaurantes. Aunque sean poquitas mesas espero que se llenen, porque ya preguntan si se pueden quedar al ver la presentación.”
Agregó que en la industria “estamos contentos porque es un avance, aunque no es la solución. Esto es sólo como para salir a tomar aire porque adentro de los restaurantes hay al menos 40 mesas. La solución es que podamos abrir cuando menos a 30 por ciento”.
En el restaurante La Única, en Polanco, se colocaron en la acera de Anatole France 10 mesas con cuatro lugares cada una, luego de que no han podido otorgar el servicio para llevar por lo especializado de su cocina –tipo mexicana-regional del norte– , afirmó Jorge Romero, quien relató que otros establecimientos en la zona permanecen cerrados desde marzo del año pasado.
En la calle Cumbres de Maltrata, en la colonia Narvarte, los meseros del restaurante Don Eraki invitan a los conductores y transeúntes a consumir en la modalidad para llevar y a partir del lunes a sentarse en alguna de las tres mesas que ayer colocaron sobre la acera.
En otra parte de la misma colonia, diversos establecimientos dedicados a la venta de carnitas, pizzas y alitas también colocaron mesas en la banqueta a modo de ensayo y mantenían el servicio para llevar, al igual que algunas cafeterías.