La Asociación Nacional de Farmacias de México (Anafarmex) reconoció que existen faltantes de algunos medicamentos en esos comercios, pero descartó que se trate de desabasto.
En entrevista con La Jornada, Antonio Pascual Feria, presidente del organismo que agrupa a más de 15 mil puntos de venta, comentó que esta falta de insumos médicos se debe a la demanda surgida por la pandemia de Covid-19.
“Sí hay faltantes, pero son eventuales y se van a ir reabasteciendo conforme pasen los días o algunas semanas”. Agregó que como sector esencial está trabajando con los fabricantes y con los distribuidores para que se arregle la situación.
“En Anafarmex tenemos este compromiso de garantizar el abasto, que es toda una cadena de suministro”, puntualizó.
Problema mundial
Agregó que la fabricación de medicamentos se hace con insumos que provienen de Europa, China e India, pero debido a la contingencia sanitaria el abasto regular de las sustancias tuvo una alteración.
“Afectó a la producción de todos los países, no nada más de México. Eso, combinado con la demanda de medicamentos que son para los síntomas (de Covid-19), pues tuvieron mayor demanda”, dijo.
Pascual Feria comentó que la falta de fármacos es en general y “no va a ser permanente, se regularizará en las próximas semanas y se van a encontrar estos fármacos.”
Destacó que el país tiene uno de los sistemas de abasto más eficientes en el mundo, porque la mayoría de las farmacias son comunitarias y se reabastecen cada 24 horas.
“Normal”, que haya faltantes
Explicó que existen dos esquemas para el abasto de medicamentos en las farmacias privadas del país. El primero es el vertical, que se refiere a los locales que tienen mayor volumen y disponibilidad, mientras el horizontal tiene menos volumen, pero un reabasto cada 24 horas en todo el país.
Apuntó que en México existe una combinación de ambos, pues el modelo vertical es el que predomina en las cadenas farmacéuticas y autoservicios, mientras los establecimientos más pequeños utilizan el segundo.
De tal forma que, dijo, es más fácil que la población halle los medicamentos que necesitan en los establecimientos más próximos, porque su reabasto es más frecuente. “No hay necesidad de tener un inventario muy grande en volumen, porque eso desproporcionaría la racionalidad de la fabricación”, apuntó.
Insistió que es “normal” que haya faltantes en las farmacias grandes, porque renuevan su suministro cada ocho días.