París. Francia exigirá una prueba negativa de Covid-19 a todos los viajeros externos a la Unión Europea e impondrá un toque de queda nacional a las 18 horas, pero el gobierno descartó este jueves un nuevo confinamiento.
"Vamos a endurecer las condiciones de entrada en el país y reforzar los controles fronterizos" para "evitar" que la cepa variante del virus "se extienda", anunció el primer ministro francés, Jean Castex, en conferencia de prensa.
A partir del lunes, todos los viajeros que deseen venir a Francia desde fuera de la UE "tendrán que presentar una prueba negativa para subir a un avión o a un barco", dijo.
Estas personas también tendrán que "comprometerse solemnemente a aislarse durante siete días una vez que lleguen a Francia, y luego volver a hacerse una segunda prueba", agregó.
Francia ya exigía una prueba negativa a la salida a los viajeros procedentes del Reino Unido, donde circula activamente una variante del virus altamente contagiosa.
Las personas que no puedan someterse a una prueba en su país de origen, tendrán la opción de someterse a una a su llegada a Francia y se verán obligados "a aislarse durante 7 días en un hotel designado por el Estado".
Para los viajes desde un país de la UE, "y en particular de países como Irlanda o Dinamarca que se enfrentan a una difícil situación epidémica", "los ministros trabajarán en la elaboración de un marco de coordinación con vistas al próximo Consejo Europeo del 21 de enero", apuntó Castex.
"Este marco deberá prever, evidentemente, excepciones relativas a los trabajadores fronterizos, los transportistas por carretera o los agentes de las empresas de transporte", con "protocolos sanitarios específicos", señaló.
¿Nuevo confinamiento?
Paralelamente, para intentar contener los contagios, el gobierno impondrá un toque de queda nacional desde las 18H00, a partir del sábado y durante al menos 15 días.
"Salvo excepciones vinculadas a las misiones de servicio público, todos los lugares, tiendas o servicios que reciban al público cerrarán a las 18 horas", señaló Castex. Aunque los comercios sí están abiertos, los restaurantes, bares, museos y cines están cerrados desde hace más de dos meses.
La mayor parte de los franceses estaban ya sujetos a un toque de queda entre las 20H00 y las 06H00, impuesto a mediados de diciembre, cuando se levantó el segundo confinamiento nacional.
Y, en 25 departamentos, sobre todo del este y del sureste, particularmente golpeados por la pandemia, sus habitantes ya debían recogerse en sus hogares desde las 18 horas.
"Según los datos disponibles hasta la fecha, parece que esta medida es eficaz en términos de salud: en los 15 primeros departamentos donde se aplicó el toque de queda a las 18 horas horas del 2 de enero, el aumento del número de nuevos casos es 2 o 3 veces menor que en otros departamentos", argumentó Castex.
Aunque descartó por el momento un nuevo confinamiento domiciliario para los 67 millones de habitantes, Castex advirtió que no dudaría en tomar esta decisión en caso de "una degradación fuerte de la situación".
Francia registró el miércoles alrededor de 23 mil nuevos casos de Covid-19, una cifra muy por encima de los 5 mil casos establecido por el gobierno para levantar las restricciones.
Más de 69 mil personas han muerto por covid-19 en Francia desde marzo pasado.