Ante la expansión de una variante más contagiosa de coronavirus, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, subrayó que las restricciones a la movilidad no son efectivas para evitar la propagación, por tanto, no se requiere ningún control específico.
“La respuesta es: no se necesita ningún control en particular y como ha ocurrido ya en 23 países, incluido México, lo más probable es que esta variante se propague por el mundo entero. Sin embargo, a pesar de su posible mayor transmisibilidad no representa, y esta es una declaración implícita de la OMS, un riesgo adicional al que representa la propia pandemia”.
Por tanto, añadió, la Organización Mundial de la Salud “ha desaconsejado imponer restricciones”.
Por otra parte, indicó que aquellas personas que se “saltaron la fila” y se vacunaron antes de que les tocara su turno recibirían la segunda dosis por razones de salud pública, para no desperdiciar la primera.
En la conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional dijo que pese a ese tipo de medidas en distintos países del mundo el coronavirus se propagó en todo el mundo, sin diferenciar las medidas que impusieron o no las distintas naciones.
Citó además el “nuevo reglamento sanitario internacional”, de 2005, el cual marca a los estados miembros de la Organización Mundial de la Salud relacionada con los mecanismos de control.
“Uno de los giros más relevantes fue precisamente el establecer que no es procedente imponer limitaciones al tránsito de personas y al tráfico de bienes materiales cuando esto no tiene una justificación técnica clara que ayude a limitar la propagación de enfermedades y es no sólo una recomendación sino una obligación explícita de la OMS”, precisó.
Destacó que la nueva variante “hoy se llama variante de preocupación porque tiene una posible mayor transmisibilidad”, pero no tiene implicaciones sobre una mayor capacidad de causar daño, virulencia, o una mayor capacidad de infectar o la posibilidad de que las vacunas pudieran ser menos efectivas. No hay evidencia de ella”.
Adujo que las personas que viajan son el medio físico de transporte del virus; en general, las personas que están fijas en un sitio de residencia permanente tienen mucha mayor probabilidad de cumplir el ciclo de ser infectadas y empezar a ser infectantes, en comparación de las personas que viajan que son menos probables de viajar con síntomas.
“Las medidas de restricción de la movilidad en las fronteras internacionales, por muchos siglos ha sido puesta en práctica con la esperanza de que será un mecanismo efectivo de parar las enfermedades infecciosas.
La historia ha mostrado “una y otra y otra y otra vez” que no es un mecanismo efectivo para impedir el trasiego de las enfermedades infecciosas.