La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, afirmó que no habrá confrontaciones con los empresarios restauranteros que abrieron sus establecimientos para recibir a comensales, pese a estar en semáforo rojo por la pandemia; sin embargo, advirtió que se cuenta con los instrumentos legales para sancionar a quienes no cumplan con la disposición sanitaria.
Al señalar que se han entregado 14 mil 555 apoyos económicos a trabajadores del sector, además de que se tiene registrados 13 mil 68 micro y pequeñas empresas para recibir créditos de 10 mil pesos, insistió en su llamado a los capitalinos a no asistir a lugares cerrados, como restaurantes, hasta que no se cambie el color del semáforo epidemiológico, porque ponen en riesgo su salud.
Recordó que se trata de una medida sanitaria fijada para el semáforo rojo, y es un acuerdo entre los gobernadores de las entidades y la Secretaría de Salud federal, cuyo propósito es disminuir contagios de Covid-19 y abrir las actividades económicas lo más rápido posible.
Insistió que es un tema que se está politizando; “sólo es cuestión de leer las redes sociales de los partidos políticos de oposición, que en su momento pidieron el semáforo rojo, y hoy que se abran las actividades económicas.
“No vamos a llegar a confrontaciones porque también eso es lo que están esperando, eso ténganlo por seguro. Ellos quieren una fotografía así y no se las vamos a dar. El gobierno de la ciudad tiene muchos instrumentos jurídicos para actuar sin necesidad de una confrontación”, expresó Sheinbaum Pardo respecto a las acciones a tomar con los establecimientos que no cumplan la norma.
Hay sustento científico
Agregó que la decisión de no permitir comensales en estos establecimientos está sustentada científicamente en artículos especializados, en los que se señala que el mayor número de contagios se da en lugares cerrados donde no se utiliza cubrebocas.
Por otra parte, la titular del Ejecutivo local señaló que se establecerá contacto con los empresas de aplicaciones para el envío de comida para que reduzcan las comisiones que cobran a los restaurantes por cada pedido, que pueden llegar hasta 30 por ciento, y se buscará también que por conducto del gobierno de la República se regule a dichas plataformas digitales.