Ciudad de México. Pese a ser domingo, un mayor gasto y tiempo invirtieron decenas de personas para llegar a su destino por el cierre de 99 estaciones del Metro, tras el incendio en la subestación eléctrica Delicias del Sistema de Transporte Colectivo.
Desde temprano, en el paradero de Indios Verdes se registraron largas filas de usuarios para abordar los autobuses de la Red de Transporte de Pasajeros (RTP) que ofrecen servicio gratuito hacia las estaciones del Metro Hidalgo y Universidad.
La sana distancia se olvidó ante la desesperación de subir a alguna de las unidades y “no perder más tiempo”, aunque trabajadores del organismo les solicitaban de manera reiterada que se separaran y colocaran correctamente el cubrebocas.
Al abordar las unidades se les obsequiaba gel antibacterial, pero algunos no lo tomaban con tal de “ganar un asiento o espacio”, yéndose casi al tope de su capacidad ante la gran demanda del servicio. Pero “este lunes será peor”, estimaron operadores.
Otros usuarios prefirieron pagar 6.50 para viajar en un autobús concesionado, cinco pesos en microbús o utilizar el Metrobús, cuyo cobro es de seis pesos, aunque para muchos significó “usar dos o tres transportes para llegar a su destino”.
Algunos entrevistados comentaron que la falta de servicio en la mitad de líneas del “gusano naranja” les llevó a invertir también más del doble de tiempo, porque “debes esperar que pasen los camiones y el tiempo es muy variado”.
Unidades de la Secretaría de Seguridad Ciudadana apoyaron a algunos usuarios a trasladarse a algunas estaciones de la línea 3 del Metro, que va de Indios Verdes a Universidad; mientras otros pasajeros tomaron un taxi o solicitaron un servicio de plataforma digital.
Comentaron que estos últimos “están saturados y algunos se han aprovechado de la necesidad para subir sus tarifas, sin que la autoridad intervenga y sin que uno pueda hacer algo”.
El cierre de los accesos a las estaciones de las seis líneas del Metro suspendidas por el incendio ha provocado también que la gente “camine más y utilice los puentes peatonales, muchos de los cuales son inseguros y no cuentan con presencia policiaca”, dijeron.
Operadores de la RTP y del transporte concesionado consideraron que este lunes, pese al semáforo rojo por la emergencia sanitaria de Covid-19, “las cosas se pondrán feas porque las unidades no serán suficientes para mover a más de un millón de personas que, según las autoridades, usan esas líneas del Metro. A ver cómo nos va”.