Madrid. Una imparable tormenta de nieve, que dejó al menos cuatro muertos, paralizó ayer parte de España, especialmente esta capital, con cientos de automovilistas bloqueados, el aeropuerto y estaciones de trenes cerrados, mientras en las calles la gente llegó a salir con esquís y hasta trineos.
La nieve iba a dejar paso al hielo y el frío en gran parte del centro del país, según los meteorólogos, tras 36 horas de fuertes precipitaciones, no vistas desde hace 50 años, y causadas por la tormenta Filomena, proveniente del Atlántico.
“Evitemos los desplazamientos y sigamos las indicaciones de los servicios de emergencia. Seamos muy vigilantes”, tuiteó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y aplaudió la labor de los “profesionales que están intentando rescatar a las personas atrapadas”.
Autoridades de Andalucía recuperaron los cuerpos de un hombre y una mujer después de que su coche fue arrastrado por un río que se desbordó cerca de la localidad de Fuengirola. Un hombre de 54 años fue hallado muerto en Madrid bajo una gran pila de nieve, mientras un indigente falleció de hipotermia en la ciudad norteña de Zaragoza.
Según el Ministerio del Interior, casi 20 mil kilómetros de 650 carreteras y puentes se vieron afectados por problemas de tráfico en el país. Adelantó que las “nevadas van a pasar a ser heladas” en los próximos días y las temperaturas de hasta menos 10 grados están previstas para la siguiente semana.
Madrid y más de la mitad de las provincias de España seguían en alerta por el mal tiempo. En la capital, las autoridades activaron la alerta roja por primera vez desde que se adoptó el sistema hace cuatro décadas y pidieron al Ejército que rescatara a los ocupantes de los vehículos atrapados en pequeñas carreteras o grandes autovías.
La inusual nevada trajo imágenes insólitas para muchos madrileños. Algunos salieron a la calle con sus equipos de esquí y recorrieron la principal avenida comercial capitalina, la Gran Vía, y la Puerta del Sol, hubo hasta un trineo tirado por cinco perros.
“La situación es de extrema gravedad” en Madrid, tuiteó el alcalde, José Luis Martínez Almeida, e instó a los habitantes a no salir de sus casas.
La unidad militar intervino en varios ejes viales con sus vehículos quitanieves y acudió en ayuda de los automovilistas atrapados en la nieve. Según los servicios de emergencia de la región de Madrid, unos 2 mil 500 vehículos fueron liberados la mañana de ayer.
Todos los centros educativos de la capital, desde jardines de infancia hasta las universidades, suspenderán sus actividades hasta el martes. Los autobuses públicos pararon, así como la recolecta de basura. Fue cerrado el aeropuerto internacional de Barajas el viernes por la noche y seguirá así hasta hoy al mediodía.
Todos los trenes con origen y destino en Madrid, tanto de larga distancia como de cercanías, además de las conexiones con el sur y el noreste de España, quedaron suspendidos, reportó la Red Nacional Ferroviaria.