Considerando que el Covid-19 puede permanecer activo en superficies plásticas por periodos de entre siete y 28 días, un manejo incorrecto de los residuos sanitarios –como caretas, guantes, cubrebocas y bolsas– puede potencializar los casos de contagio por la enfermedad, advirtió Ornela Garelli Ríos, especialista en consumo responsable y cambio climático de Greenpeace México.
Añadió que, en la mayoría de los casos, los desechos sanitarios “no se tiran correctamente”, y eso es visible porque están sobre la calle y en espacios públicos, “donde otras personas pueden entrar en contacto con esos materiales”.
Entonces, “si las personas que están contagiadas los usan y después se tiran a la basura, sí representan un riesgo de contagio público”, particularmente para las personas que se encargan de llevar la basura, separarla y prepararla para su reciclaje. Por ello, reiteró, si bien se debe mejorar la gestión de residuos, “lo importante es la prevención”, que es evitar generar este tipo de desechos mediante el empleo de equipos reutilizables como parte de una respuesta de emergencia efectiva.
La especialista puntualizó que, en definitiva, la pandemia ha traído un aumento en el uso de plásticos de un solo uso, “particularmente, el problema yo lo vería en los cubrebocas quirúrgicos desechables y en los guantes, que de acuerdo con datos de Naciones Unidas, se espera que 75 por ciento de éstos terminen en la naturaleza, incluidos los océanos”.
Exhortó a descartar “la idea de que los plásticos de un solo uso nos van a ayudar a evitar contagios. Eso no es así, porque estudios indican que el Covid-19 puede permanecer activo en superficies plásticas hasta por siete días, incluso hay otros estudios que indican hasta 28 días”.