Aunque apenas cuenta con dos ediciones, el Encuentro Cultural de la Frontera Sur, Sur.Real, ha logrado convertirse en un importante espacio de acercamiento hacia las poblaciones que habitan en el sur del país y sus fronteras.
En su primera edición, el festival instalado en Bacalar, Quintana Roo, se celebró de manera presencial. Desde su sede en el Caribe mexicano, Sur.Real organizó conferencias, mesas redondas, conciertos y talleres, entre otras actividades destinadas a despertar el espíritu de diálogo con una visión mexicana, caribeña, centro y sudamericana en la población local y visitantes.
Para el segundo año tuvo que modificar su funcionamiento, pero no el espíritu de difusión cultural que promueven los organizadores. Debido a la pandemia, las actividades académicas y culturales fueron transmitidas a través de su cuenta de Facebook. El modelo virtual, además de un reto, también representó la oportunidad de llegar a más personas, lo que se reflejó en el número de vistas.
Ventajas de la tecnología
Mientras que en su primer año el Encuentro Cultural de la Frontera Sur reunió a cerca de 15 mil personas, para el segundo la cifra aumentó a 70 mil espectadores virtuales. Los resultados han hecho ver a los organizadores la oportunidad de combinar ambas formas de difusión.
Eduardo Lizalde Farías, director del Sur.Real, explicó que aunque sigue siendo muy importante el espíritu comunitario, también han podido atestiguar el impacto positivo de utilizar la tecnología. Gracias a la edición de 2020, las actividades que se llevaron a cabo del 17 al 19 de diciembre pudieron ser vistas desde Belice, Perú, Uruguay, Argentina, Brasil y Venezuela.
Las próximas ediciones del encuentro seguirán tomando en cuenta ambas modalidades, pues en el formato digital existen grandes ventajas, como consultar las actividades aun después de concluido el festival. Los organizadores también sienten interés por acercarse de una forma real al público.
Hoy por hoy, Lizalde Farías reconoce que faltan “detalles por pulir para que el Sur.Real sea un encuentro todavía más incluyente”.
Lamenta que en 2020, pese a haber abordado aspectos sobre los mayas, no haya habido presencia real de comunidades pertenecientes a esa cultura.
El año pasado, el encuentro dedicó un día a dar voz a los grupos feministas que habitan en la zona sur del país.
De acuerdo con el director, esa forma de pensar los encuentros culturales resulta necesaria para México.
Con motivo de que el Sur.Real es apoyado por instituciones públicas de difusión de arte y cultura, principalmente de Quintana Roo, así como del centro cultural independiente El Galeón Pirata, el festival mantiene sus actividades gratuitas.
Todas las ponencias de la edición pasada se encuentran disponibles en la página del encuentro, facebook.com/encuentrofronterasur