El ex director de Petróleos Mexicanos (Pemex) Emilio Lozoya Austin, así como su esposa, hermana y su madre, enfrentan procesos penales ante la justicia mexicana, el ex funcionario tendrá que comparecer en marzo próximo ante un juez, para saber si la autoridad judicial acepta que opte al criterio de oportunidad y se asuma como testigo colaborador de la Fiscalía General de la República (FGR), en el caso de Odebrecht y la compra fraudulenta de Agronitrogenados.
La Fiscalía General de la República (FGR) informó que la audiencia intermedia de este proceso podría tener lugar después del 7 de marzo, cuando finaliza el plazo para la investigación complementaria, “la cual quedará pendiente de señalarse, según las normas de emergencia establecidas por el Poder Judicial Federal”.
Mientras tanto, sostuvo, el ex funcionario continúa sujeto a las medidas cautelares, las cuales incluyen un brazalete electrónico y la obligación de acudir a firmar ante el juez. “Dicho juzgado, hasta el día de hoy, no ha reportado que la persona haya infringido las medidas impuestas por la autoridad judicial”, añadió la fiscalía.
La madre de Lozoya, Gilda Margarita Austin, fue extraditada de Alemania en noviembre de 2019, para responder ante la justicia mexicana por asociación delictuosa y operaciones con recursos de procedencia ilícita, los cuales habría cometido al permitir que dinero de los sobornos pagados a su hijo fueran depositados en cuentas bancarias a su nombre.
Debido a su avanzada edad, el juez de la causa le permitió seguir su proceso en libertad, sujeta a medidas cautelares.
Prófugas, su esposa y su hermana
Gilda Susana Lozoya Austin, hermana del ex funcionario, es acusada de ocultar dinero, mediante varias cuentas de empresas fachada.
Mediante diversos amparos la aún prófuga ha intentado evitar la orden de aprehensión en su contra, la cual fue sin embargo ratificada en diciembre pasado.
Marielle Helene Eckes, esposa de Lozoya, también está prófuga, acusada de operaciones con recursos de procedencia ilícita y asociación delictuosa.