El canciller Marcelo Ebrard Casaubón y el asesor de Seguridad Nacional del siguiente gobierno de Estados Unidos, Jake Sullivan, sostuvieron ayer una reunión a distancia para hablar sobre algunos de los principales temas de la agenda bilateral, en particular la colaboración para garantizar una migración “segura, ordenada y humana”.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó en un comunicado que los dos funcionarios acordaron trabajar en el corto plazo en un plan migratorio con una visión centrada en la protección de los derechos humanos de las personas, así como en una respuesta regional centrada en el desarrollo económico.
El encuentro se dio en seguimiento a la plática que el pasado 19 de diciembre tuvieron el presidente Andrés Manuel López Obrador y el mandatario electo de Estados Unidos, Joe Biden, quien tomará posesión el próximo 20 de enero.
La oficina de Biden detalló por su parte que la conversación “es parte de la larga tradición de interacción de alto nivel entre las administraciones estadunidenses entrantes y el gobierno de México. La discusión se centró completamente en los temas que surgirán después del 20 de enero, con el fin de preparar la cooperación entre los dos países, incluyendo los esfuerzos para garantizar un sistema de migración seguro, ordenado y humano”.
En la llamada, el canciller mexicano expuso la importancia de la cooperación con los países del llamado Triángulo Norte de Centroamérica, en particular, sobre los avances del Plan de Desarrollo Integral como una visión de cooperación internacional para el progreso, elaborada en colaboración con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe y las naciones centroamericanas.