La autorización para uso de emergencia de la vacuna contra el Covid-19, desarrollada por la farmacéutica AstraZeneca, otorgada este lunes por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), permitirá “incrementar la cobertura de vacunación y garantizar que si alguna de los otros biológicos en desarrollo falla, se tendrá más de una opción para atender la demanda de inmunización”, señaló Gilberto Castañeda Hernández, experto en evaluación de fármacos e investigador del Departamento de Farmacología del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav).
Destacó que la vacuna de AstraZeneca “emplea una base tecnológica distinta a la Pfizer-BioNtech, ya que se crea usando adenovirus de chimpancé como vector para estimular la respuesta inmunológica en el individuo, y al igual que la de Pfizer, se requieren de dos dosis para desarrollar los anticuerpos que permitan protegernos y romper las cadenas de contagio”.
El especialista agregó que ante una emergencia sanitaria global como la que enfrentamos “se otorgan estas autorizaciones para uso de emergencia, lo que no implica una autorización de comercialización, pues no se trata de hacer negocio, sino de detener la pandemia y su mortalidad, y la disrupción económica que ha ocasionado”.
Castañeda Hernández enfatizó que uno de los desafíos más grandes, además de “vacunar a gran parte de la población del planeta, es precisamente la capacidad que tienen las farmacéuticas de escalar su producción para atender una demanda de miles de millones de vacunas, por la que ninguna empresa farmacéutica por si sola puede hacer frente a esta demanda, por eso es tan importante que México cuente con varias opciones para adquirir más de una vacuna”.
Explicó que tanto la vacuna de AstraZeneca, como la de Pfizer-BioNtech, las únicas con autorización para uso de emergencia en nuestro país, se deben aplicar “bajo condiciones muy restringidas y con una estricta vigilancia por parte de las autoridades, porque estamos aprendiendo de su aplicación, y no sólo en México, sino en el mundo, y en ningún país cuentan con una autorización sin restricciones”.