En la víspera de la llegada de los Reyes Magos se intensificó la oferta de juguetes en el Eje 1 Norte, donde la circulación vehicular se vio afectada desde Paseo de la Reforma hasta Circunvalación, por la gran cantidad de puestos y de ayudantes de Melchor, Gaspar y Baltasar, lo que llevó a la policía a reforzar el operativo de prevención, seguridad y vigilancia en la zona.
Un total de mil 200 policías de Proximidad, Metropolitana y Complementaria, apoyados con patrullas, unidades especiales y helicópteros del Agrupamiento Cóndores, fueron desplegados en las 16 alcaldías para inhibir la comisión de delitos de alto impacto.
Mientras, este miércoles 300 policías de la Subsecretaría de Control y Tránsito garantizarán la movilidad, evitarán el estacionamiento prohibido y darán prioridad de paso a los servicios de emergencia, para lo cual se coordinarán con las autoridades de las diversas demarcaciones.
Los uniformados, que vigilarán principalmente plazas comerciales, tiendas de autoservicio, bancos, estaciones terminales del Metro y autobuses; así como entradas y salidas carreteras, invitarán a la ciudadanía por medio de perifoneos a guardar la sana distancia y no asistir a lugares concurridos, debido a la emergencia sanitaria de Covid-19.
Sin embargo, este llamado no fue atendido por los ayudantes de los enviados de oriente, quienes desbordaron el Eje 1 Norte para aprovechar las últimas horas y adquirir alguno de los juguetes solicitados por los niños.
Su recorrido por los diversos puestos instalados en ambos lados de la avenida, así como en las calles aledañas, les llevó entre dos y tres horas en busca del mejor precio, aunque “no hubo tal, pues estaban al mismo precio que en el súper”, comentaron algunos entrevistados.
Policías de las estaciones Tepito, Lagunilla y Garibaldi del Metro permitieron el ingreso de decenas de personas con grandes bultos y bolsas de color negro, donde llevaban muñecas, carriolas, máquina para hacer pizzas o raspados, y estuches de belleza.
Las bicicletas, triciclos y patinetas fueron metidas en bolsas transparentes, lo cual llevaba a la gente a esperar hasta tres trenes para ingresar, ante la gran cantidad de usuarios, algunos de los cuales aprovecharon para llevar también la tradicional rosca de Reyes.
En colonias populares, la prohibición para instalar puestos llevó a algunas personas a estacionar sus autos y colocar los juguetes que ofrecían, aunque la presencia de patrullas los hacía retirarse.
A diferencia de otros años, la foto del recuerdo con Melchor, Gaspar y Baltasar no se llevó a cabo, pues no tuvieron la posibilidad de colocarse en plazas, tiendas departamentales o corredores comerciales, debido a la crisis sanitaria por el Covid.