Durante 2020 se emitieron 121 declaratorias de emergencia y desastre en todo el país, de las cuales 42 fueron de desastre y 79 de emergencia. Chiapas y Oaxaca fueron las entidades que más resintieron los efectos de catástrofes naturales, particularmente por inundaciones y sismos, según la Coordinación Nacional de Protección Civil, de la Secretaría de Gobernación.
La cifra representa un alza de 33 por ciento con respecto a 2019, cuando solamente se presentaron 91 declaratorias de desastre y de emergencia pero, al mismo tiempo, una reducción de 25 por ciento respecto a lo ocurrido en 2018 –con la pasada administración en su mayoría–, cuando se presentaron 151.
Para hacer frente a los efectos inmediatos de los diversos sucesos que sacudieron al país a lo largo del año, el gobierno federal debió asignar mil 699 millones de pesos con el fin de adquirir insumos para atender a la población afectada por fenómenos naturales perturbadores. De igual forma, se autorizaron partidas por 2 mil 770.46 millones de pesos para atender los daños ocurridos por fenómenos naturales perturbadores canalizados, en ambos casos dirigidos a los 17 estados y 705 municipios con daños.
El informe correspondiente a 2020 destaca que la principal atención debió darse a los efectos de los fenómenos hidrometeorológicos en los que incidieron, sobre todo, la atípica temporada de huracanes, pues fueron la causa de 36 de las declaratorias de desastre emitidas por la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNCP). En contraste, fueron 10 por eventos geológicos.
Según el reporte, en el año impactaron en la costa atlántica ocho ciclones (aunque se formaron siete huracanes categorías 1 y 2, así como seis categorías 3, 4 y 5), una depresión tropical y siete tormentas tropicales. Por el Pacífico golpearon costas mexicanas tres huracanes, aunque se formaron cuatro en total, además de cinco depresiones tropicales y 12 tormentas tropicales.
El informe de la CNPC también da cuenta de que los incendios forestales registrados a lo largo de 2020 sumaron 5 mil 799, la cifra más baja de los últimos cinco años: en 2016 fueron 8 mil 397; en 2017, 8 mil 556; en 2018, 6 mil 940, y en 2019, 7 mil 399. Los incendios en este año afectaron 376 mil 138 hectáreas, lo que representa una reducción con respecto al terreno afectado en 2019, cuando sumaron 633 mil 662 hectáreas.
Del total de incendios en 2020, 53 por ciento (3 mil 109) han afectado superficies menores a cinco hectáreas. Sólo en 14 por ciento de los casos (827) se han consumido superficies mayores de 51 hectáreas.