Briceño. El partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC), heredero del grupo armado con mismas siglas, denunció ayer el asesinato de la guerrillera desmovilizada Yolanda Zabala Mazo y de su hermana Reina Zabala Mazo en Briceño, Antioquia.
Yolanda, firmante de paz, y su hermana Reina fueron asaltadas en una zona rural por un sujeto que “les propinó varios impactos de proyectil de arma de fuego”, según la FARC. “Yolanda realizaba su proceso de reincorporación en el ETCR (Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación) de la Plancha, Anorí”, explicó el diputado por la FARC Omar Restrepo, informó la emisora Radio Caracol.
Sandra Ramírez, senadora por la FARC, lamentó en su cuenta de Twitter: “¡Qué noticia tan dolorosa! A tan sólo 12 horas de haber iniciado el nuevo año nos informan del asesinato de Yolanda Zabala, firmante de la paz, junto a su hermana Reina Zabala en Briceño, Antioquia. ¡Qué indiferencia la de Iván Duque!”, señaló en referencia al presidente colombiano.
Según el recuento del partido de la FARC, con esta muerte ya son 250 los antiguos miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) asesinados tras la firma del acuerdo de paz en 2016.
En tanto, el líder social Gerardo León fue asesinado en la región de Meta en Colombia y se ha convertido en la primera víctima del año entre los miembros de este colectivo que fue duramente golpeado durante 2020.
El día de Año Nuevo, el docente León murió a causa de las heridas hechas con un arma blanca, cosa que la policía local atribuyó a una “riña” que se debió a la “excesiva ingesta de alcohol”.
