Río de Janeiro., El juez Ricardo Lewandowski, del Supremo Tribunal Federal de Brasil, determinó ayer que la defensa del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011) acceda a mensajes recogidos en una operación para desarticular una organización criminal que practicaba delitos cibernéticos.

En la operación denominada Spoofing (Usurpación), la Policía Federal detuvo a finales de julio en Sao Paulo a cuatro sospechosos de hackear los teléfonos celulares del ex juez y ex ministro de Justicia Sergio Moro, así como de otras autoridades y fiscales de la investigación conocida como Lava Jato.

Se cumplieron en su momento 11 órdenes judiciales, siete órdenes de búsqueda y captura y cuatro de prisión preventiva en Sao Paulo, Araraquara y Ribeirao Preto.

En ese periodo, el sitio web The Intercept Brasil publicó una serie de conversaciones entre Moro y fiscales de Lava Jato, entre ellos Deltan Dallagnol, coordinador de la operación.

Tales mensajes pusieron al desnudo la falta de imparcialidad de Moro y su influencia en procedimientos y estrategias de Lava Jato, así como sus claras intenciones de condenar sin pruebas a Lula.

Con la decisión de Lewandowski, que representa otra victoria judicial para el fundador del Partido de los Trabajadores, el juez del décimo tribunal penal federal compartirá el contenido con los abogados del ex dirigente obrero.

“Ante la verosimilitud del alegato y teniendo en cuenta el derecho constitucional a una amplia defensa, respaldo por el momento, sin perjuicio de medidas posteriores, la petición formulada por el demandante (Lula)”, indica un extracto del fallo del ministro.

Agrega que el veredicto se adoptó sobre la base de varios artículos del Código de Procedimiento Civil, que autorizan el acceso a los mensajes informales “que se intercambiaron dentro del grupo de tareas de Lava Jato, que se encuentran en los archivos reunidos durante la operación Spoofing”.

Lewandowski aclara, sin embargo, que Lula sólo puede tener acceso a las conversaciones que “le conciernen de manera directa o indirecta”, así como a las relacionadas con las investigaciones y los procedimientos penales contra él presentados en el décimo tercer tribunal penal federal de Curitiba o en cualquier otra jurisdicción, aunque sea extranjera.

Lewandowski dio a la justicia del Distrito Federal 10 días para cumplir con la determinación, con el apoyo de expertos de la Policía Federal.

De acuerdo con la solicitud, son siete terabytes de información obtenidos en la operación, en los cuales se involucra también a terceras personas.

El juez también estableció que los datos e información relacionados con estas personas deben permanecer confidenciales.