Chilpancingo, Gro. El Consejo Indígena y Popular de Guerrero – Emiliano Zapata (CIPOG-EZ) y la Organización Campesina de la Sierra del Sur dieron a conocer que cuatro indígenas nahuas que pertenecen a dichas organizaciones fueron asesinados ayer en la carretera federal Chilapa-Tlapa.
Mediante un comunicado informaron que los fallecidos son María Agustín Chino, Amalia Morales Guapango, José Benito Migueleño y Miguel Migueleño.
“Los indígenas nahuas de la comunidad de Alcozacán, municipio de Chilapa de Álvarez, desaparecieron desde el día viernes 18 de diciembre. Ayer (domingo) al mediodía sus cuerpos fueron encontrados en su propia camioneta en la carretera Chilapa-Tlapa. Fueron torturados y torturadas, atados de las manos y les dieron el llamado tiro de gracia” , señalaron.
Recordaron que se cumple un mes que “rompimos el cerco narco-paramilitar, el 18 de noviembre miles de indígenas nahuas volvimos a recuperar la movilidad en nuestro territorio, 22 comunidades cercadas por el grupo narco-paramilitar Los Ardillos decidimos decir ¡Ya Basta! porque no es vida lo que estamos viviendo. Pero ya comienzan a cobrarse la cuota de sangre, porque nos quieren esclavos y nos quieren sometidas y sometidos”.
Afirmaron que denunciaron la situación en que viven al subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas, “quien solo vino a sembrar división y compra de conciencias justamente en Alcozacán donde el 17 de enero del 2020 fueron asesinados 10 compañeros en esa masacre.
“Y ahora lejos de llegar la justicia solo nos envían más muerte, y nos mandan sus señales de guerra. Encinas y (el presidente Andrés Manuel) López Obrador, no son diferentes al PRI, ustedes se han convirtiendo en aquello que simularon combatir”, enfatizaron,
“Hoy y en los tiempos que vienen nos seguirán asesinando, sobre nuestros cadáveres se va a construir ese México en el que nuevamente estorbamos. Pero ya no podemos continuar en la esclavitud, aquí en la montaña baja de Guerrero el Covid-19 es lo de menos, nos están asesinando, así, como animales. Sin que nadie escuche, sin que nadie haga nada”, añaden en la misiva.
Responsabilizaron por dichos crímenes “al gobierno municipal de Chilapa de Álvarez, a cargo de Jesús Parra García, del PRI; al gobierno estatal de Héctor Astudillo Flores, del PRI; a la presidencia de la República a cargo de Andrés Manuel López Obrador, de Morena. Los tres niveles de gobierno saben perfectamente lo que sucede en Chilapa, pero hacen sus negociaciones en vez de terminar con el crimen organizado”.
Aseguraron que “Celso Ortega Jiménez es el mando operativo de Los Ardillos. y (el diputado local del PRD) Bernardo Ortega Jiménez es el mando político; la policía ministerial de Chilapa de Álvarez, como ya lo habíamos denunciado, son parte del problema, y la Guardia Nacional sabe todo esto, después de tanto tiempo en el lugar solo están espiando nuestra organización en vez de desmantelar la delincuencia organizada”.
También manifestaron que los promotores estatales “continúan recibiendo amenazas de muerte y la intimidación en las comunidades de base del CIPOG-EZ, CNI-CIG, está cada vez más recia. Ahora el asesinato y nuevamente la impunidad por parte de las autoridades solo nos deja ver sus complicidades”.
“Hermanas y hermanos que no nos han dejado solos ayúdenos a crecer esta palabra y que se sepa lo que hace la 4T y su aliado el PRI en Guerrero. Que nuestras muertes no queden en la sombra del ‘progreso’, que nuestra sangre siembre el camino de la libertad para nuestros pueblos. Nosotros, nosotras nos estaremos movilizando y reiteraremos nuestro decidido ¡Ya basta! Nuestra lucha es por la vida y por la libertad, no queremos ser esclavos del crimen organizado, ni moneda de cambio de malos gobiernos disfrazados”, concluyeron.