¡Feliz nueva normalidad!, así presenta Yuliana Ballesteros su servicio de venta de cenas navideñas y de fin de año, cuyos pedidos han aumentado al doble por la pandemia de Covid-19.
Egresada de la carrera de gastronomía, se dedica cada año a vender cenas por pedido; en esta misma fecha, pero de 2019, sumaba 25 pedidos, ahora tiene 50 en puerta, que califica de “brutal”.
“Hay una sobreoferta muy considerable de opciones este año y obviamente todo mundo está buscando opciones rápidas y cómodas para celebrar en sus casas. Estamos cargados de trabajo.”
En su menú, que es adornado con coronavirus en lugar de copos de nieve y un Santaclós con cubrebocas, se ofrece puré rústico, ensaladas, pastas, pierna, bacalao y pollo en diversas presentaciones. Debido a la contingencia sanitaria las entregas son a domicilio.
Dice que trabajará fuertemente este año para cerrar con números positivos y enfrentar la crisis económica, pues cree que el semáforo rojo perdurará hasta después del 10 de enero.
“Yo creo que nos dijeron esa fecha para que no nos espantáramos tanto, pero yo creo que se va a alargar más; entonces, hay que echarle ganas porque la gente no va a dejar de comer, no va a dejar de beber, y tenemos que sobrellevar esto de la mejor manera.”
En ese contexto, restaurantes apuran a sus clientes a realizar sus pedidos; otros, incluso, ya concluyeron su periodo de recepción de solicitudes.
Por ejemplo, mientras el restaurante Los Danzantes solicita realizar el pedido lo más pronto posible debido a la alta demanda de cenas para fin de año, el restaurante Balcón del Zócalo recibió pedidos hasta el 18 de diciembre; así también la empresa banquetera Rosendo Pérez, que cerró pedidos el sábado pasado.
La Antojería Sazón Mexicano recibirá pedidos para la cena navideña hasta hoy, mientras La Cocina de Eva aceptará hasta el martes.