Aun con el semáforo en rojo, en la Basílica de Guadalupe se celebró una misa con la presencia de 350 fieles, mientras en una iglesia de la colonia Tacubaya fueron desalojadas más de 500 personas por personal de la alcaldía Miguel Hidalgo.
A pesar de que la Arquidiócesis de México informó que desde el sábado pasado ya no habría ritos con la presencia de fieles en sus templos, no sucedió así en La Villa, ya que en el culto dominical de mediodía se permitió la entrada de personas.
El área de comunicación de la Basílica argumentó que este fin de semana se tenían programadas misas que no podían ser canceladas, incluida la que ofició el cardenal Carlos Aguiar Retes, e indicó que asistieron aproximadamente 350 personas que respetaron los protocolos sanitarios, cifra menor al aforo que durante la pandemia se ha permitido, que es de 500, y agregó que a partir de hoy ya no se permitirá la participación presencial de fieles.
El sábado pasado la Arquidiócesis de México informó que a partir del 19 de diciembre y hasta el 10 de enero no habrá misas con la presencia de gente en sus templos; sin embargo, continuarán abiertos y al servicio de las personas “para alentar, con la debida prudencia y según el protocolo establecido, la oración cotidiana que estos tiempos necesitan”.
En tanto, la alcaldía Miguel Hidalgo informó que ayer alrededor de las 12 del día unas 500 personas fueron desalojadas del Templo de los Milagros, ubicado en avenida Revolución esquina Primero de Mayo, colonia Tacubaya, “donde se realizaba una misa de manera irresponsable”.
Al lugar acudió personal de la gendarmería de uso de suelo, así como de la Comisión de Seguridad de la propia alcaldía, quienes respondieron a una denuncia ciudadana que reportaba la concentración de personas.
La dependencia dio a conocer que se realizó la verificación administrativa del inmueble.