El mexicano Saúl Canelo Álvarez y el inglés Callum Smith cumplieron ayer con la báscula al marcar las 168 libras reglamentarias para su combate por el título supermediano de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y el vacante del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), el cual se efectuará este sábado en el Alamodome de San Antonio, Texas.
Esta contienda significará el regreso del púgil tapatío a los cuadriláteros, pues su más reciente pelea se llevó a cabo en noviembre de 2019, cuando despojó del cinturón semipesado al ruso Sergey Kovalev.
Asimismo, marcará su retorno a los pesos supermedianos, luego de aventurarse el año pasado en la categoría de los semipesados.
“Es un boxeador sumamente diferente a todos contra los que he peleado, pero sé de las capacidades que tiene y también conozco las mías, por mi experiencia sé que puedo con eso y más, va a ser una gran combate, estoy listo para este gran reto”, declaró ayer el Canelo durante la ceremonia de pesaje.
A su vez, Smith aseguró que aprovechará la gran diferencia de estatura que existe entre él y su oponente mexicano, quien mide 1.75 metros, mientras el inglés tiene una altura de 1.91.
“Además de mis habilidades, he platicado con mi equipo de diversas tácticas y, sobre la altura, será difícil mantener siempre mi distancia, pero será emocionante para todos”, mencionó Smith luego de haber subido a la báscula.
Álvarez llegará a esta contien-da con un récord de 53-1-2 con 36 nocauts, dos de ellos en sus últimas tres peleas. En tanto, el británico se mantiene invicto, con un registro de 27-0, 19 de ellos por la vía rápida.
Para ambos boxeadores, este será su único combate de 2020, tras la pausa derivada de la pandemia de Covid-19. La pelea más recien-te de Smith también fue en noviembre del año pasado, cuando venció por decisión unánime a John Ryder para retener el título supermediano de la AMB, el cual defenderá por tercera ocasión luego de ganarlo en 2018 tras derrotar a George Groves.
La contienda también le ofrece-rá a Smith la oportunidad de vengar a su hermano mayor Liam, quien fue noqueado por el Canelo en 2016, en Arlington, Texas.
Trascendió que sólo quedan 800 entradas de las 12 mil que se pusieron a la venta para este combate, el cual será trasmitido a todo el mundo por la plataforma DAZN.
Esta será la tercera pelea que contará con miles de aficionados, tras la crisis por la pandemia. Las anteriores fueron la de Gervonta Davis y Leo Santa Cruz (11 mil asistentes) en el Alamodome en octubre pasado; y la del 5 de diciembre entre Errol Spence y Danny García (16 mil espectadores) en el AT&T Stadium de Arlington.