La contaminación ambiental aumenta el riesgo de muerte por Covid-19, por lo que expertos llamaron a la población a no salir de casa este fin de año.
“Estos virus (SARS-CoV-2) encuentran un terreno propicio en los pulmones que han estado expuestos a niveles de contaminación y dificultan la capacidad del organismo para responder adecuadamente”, dijo Horacio Rojas, director de Salud Ambiental del Instituto Nacional de Salud Pública en conferencia de prensa virtual.
Abundó que las concentraciones de partículas, sumadas a la presencia de la influenza estacional y del Covid-19, representan un riesgo mayor para las personas de grupos sensibles, como adultos mayores, personas con enfermedades respiratorias prexistentes, obesidad, hipertensión o inmunodeprimidos. Incluso, la exposición crónica a los contaminantes disminuye la capacidad de respuesta inmunológica.
Añadió que los contaminantes que se respiran comúnmente pueden generar efectos agudos a la salud, crónicos y de severidad variable, de acuerdo con el tipo de contaminante, la concentración, el tiempo de exposición, los patrones de exposición y la tasa de ventilación.
Ante esa situación, los expertos llamaron a la población a resguardarse en sus casas, evitar la exposición al aire libre y, en caso de salir, hacer uso estricto de cubrebocas, ya que la época invernal no favorece la dispersión de contaminantes.
Víctor Hugo Páramo, titular de la Comisión Ambiental de la Megalópolis, explicó que cada fin de año la contaminación del aire se hace severa, entre otros factores, por la inversión térmica y la quema de leña y pirotecnia.
La situación es histórica, pues desde 2019 se han registrado cuatro activaciones de contingencia ambiental el 25 de diciembre y el 1º de enero.
Insistió en el llamado a quedarse en casa, pues, de acuerdo con datos del Institute for Health Metrics and Evaluation, se estimó que en México, en 2017 se registraron 48 mil 72 muertes prematuras a causa de la contaminación del aire.