París. Hayat Boumeddiene, viuda de un atacante del grupo yihadista Estado Islámico (EI), y Alí Riza Polat, encargado de logística, fueron declarados culpables ayer de “terrorismo” en el juicio a 14 personas vinculadas con los atentados de enero de 2015 en París contra el semanario satírico Charlie Hebdo y el supermercado kosher Hyper Cacher.
Las personas, cuyo juicio duró más de tres meses están acusadas de haber brindado apoyo logístico a los autores materiales de los ataques que dejaron 17 muertos, según la sentencia del Tribunal Especial de lo Penal de París. Los agresores Amédy Coulibaly y los hermanos Said y Chérif Kouachi, murieron en las redadas policiales realizadas tras los atentados.
El tribunal escuchó a 144 testigos, 14 peritos y 200 partes interesadas, principalmente amigos y familiares de las víctimas.
Boumeddiene, viuda de Coulibaly, fue sentenciada en ausencia por “financiar al terrorismo” y “pertenecer a una red criminal terrorista”, por lo que fue condenada a 30 años de prisión. Se cree que está viva y huyó a Siria, donde se unió al EI.
También se cree que los hermanos Mohamed y Mehdi Belhoucine, juzgados también en ausencia, huyeron a Siria tras los atentados y murieron luchando en las filas del grupo yihadista. Aun así, Mohamed recibió cadena perpetua, de acuerdo con el fallo.
Alí Riza Polat, presentado como el “brazo derecho” de Coulibaly y el único de los tres principales acusados presentes en el juicio, fue declarado culpable de “un delito terrorista” por su complicidad al ayudar a los autores materiales a obtener armas, municiones y vehículos, por lo que recibió 30 años de prisión. Su abogada de inmediato informó que apelará de la sentencia.
Tres de los acusados restantes fueron declarados culpables de “asociación con delincuentes terroristas” y recibieron sentencias de entre 13 y 20 años. Otros siete fueron condenados por el delito menor de “asociación con delincuentes” y condenados a entre cuatro y 10 años.
Las penas pronunciadas por Régis de Jorna, presidente del tribunal especial de cinco jueces, son inferiores a las solicitadas por la fiscalía antiterrorista, que pedía la perpetuidad contra dos de los acusados y de cinco a 30 años de cárcel para los otros 12, al estimar que habían sido “agentes claves” en los ataques.
El 7 de enero de 2015 los hermanos Kouachi asesinaron a 12 personas en la redacción de Charlie Hebdo luego de que publicó controvertidas caricaturas del profeta Mahoma. Un día después Coulibaly, cercano a Chérif Kouachi, mató a una policía municipal y al siguiente a otros cuatro hombres, todos judíos, durante una toma de rehenes en el supermercado kosher Hyper Cacher.
Diez meses después, otro grupo islamita lanzó una ola de tiroteos y atentados suicidas con bombas en la ciudad, matando a 130 personas, muchas de ellas abatidas a tiros en la sede del bar Bataclan durante un concierto.
Luego de estos acontecimientos, Francia ha sido víctima de múltiples ataques yihadistas. Los más recientes se dieron este año, entre las que figuran la decapitación de un profesor en París tras mostrar las caricaturas del profeta Mahoma en una clase y el apuñalamiento de tres personas en la iglesia de Notre Dame de Niza.