Un canto de optimismo y esperanza fue el ofrecido por la Compañía Nacional de Ópera (CNO) con el estreno de Beethoven 250. Fidelio, ¡Oh, qué alegría, respirar en libertad!, efectuado este miércoles como parte de los festejos organizados por el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) por el 250 aniversario de Ludwig van Beethoven en la fecha exacta de su nacimiento.
La presentación musical consistió en la interpretación de la pieza conocida como Coro de los prisioneros, de la ópera Fidelio, del célebre compositor alemán, realizada de manera virtual por el Coro y la Orquesta del Teatro de Bellas Artes.
De cinco minutos y 40 segundos, la breve actuación fue transmitida en la página oficial de la CNO en Facebook (https://www.facebook.com/operainbal) del programa Contigo en la distancia de la Secretaría de Cultura federal, y en una hora había alcanzando más de mil 700 reproducciones. Allí se mantendrá de forma permanente para el disfrute del público.
Ataviados con trajes de gala: ellas de vestido largo, ellos de frack, como amerita toda ocasión especial, los músicos y cantantes –bajo la dirección musical de Luis Manuel Sánchez– efectuaron su trabajo desde sus respectivos hogares, lo que confirió a la gala un toque cálido e íntimo, resaltado por una cuidada producción técnica en términos de imagen y sonido.
El Coro de los prisioneros es considerado a escala planetaria un himno a la libertad, equiparable, en términos conceptuales, a las partes de la Oda a la alegría de Schiller incorporadas por el genio de Bonn en su celebérrima Novena sinfonía.
Fidelio o el amor conyugal, con libreto en alemán escrito por Joseph F. Sonneleither, sobre el texto del francés Jean-Nicolás Bouilly, compendia varios de los ideales que Beethoven profesó y ejerció en su vida, como la justicia, el amor platónico, la lealtad y la libertad.
La ópera narra la historia de Leonora, esposa de Florestán, quien está preso por razones políticas bajo la custodia del siniestro Pizarro. Leonora, travestida en hombre bajo el nombre de Fidelio, se las arregla para trabajar en la prisión y lograr, gracias a su identidad de empleado carcelario, liberar a su esposo condenado a muerte por su enemigo.