La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, afirmó que el cierre de actividades económicas en la Ciudad de México será la última acción que se tome, por lo que su administración hará todo lo que esté a su alcance para reducir la curva de contagios de Covid-19 e insistirá en la cooperación ciudadana para no llegar a esa situación extrema, que sería muy dolorosa e impactaría en el bienestar de las familias capitalinas.
En su videoconferencia, sostuvo que esa fue la razón por la que tomó la decisión de hacer la declaración de emergencia por Covid-19 en la ciudad –en lugar de regresar al semáforo rojo–, de la que deslindó al presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Esta es la situación y claro que respetamos, y pues venimos del mismo lugar, del mismo movimiento del Presidente la República y con toda admiración, pero las decisiones de la ciudad las tomamos nosotros”, puntualizó.
Acotó que no fue una decisión personal, sino a partir de la información que se revisa todos los días en el Comité de Salud y en total coordinación con el gobierno federal, desde el Presidente, el subsecretario de Salud, Hugo López Gatell, hasta los titulares de las distintas instituciones de salud.
“Yo planteé la posibilidad de que no cerráramos todo y entre todos estamos en esta circunstancia. Yo tomé la decisión como jefa de Gobierno, no eludo mis responsabilidades de declarar en la ciudad una alerta y emergencia por Covid-19 de acuerdo con lo que revisamos en el Comité de Salud”, precisó.
Sin embargo, apuntó que si se tiene que cerrar, pues “iremos hacia allá, pero vamos a hacer el esfuerzo todos, gobierno y ciudadanía, para no tener que llegar a esos límites”.
“No es un tema de poner una cosa sobre la otra, ni mucho menos, sino… ustedes saben, la Ciudad de México ha perdido una cantidad muy importante de empleos, el gobierno federal dio cerca de 2 mil 500 millones de pesos en apoyos, nosotros prácticamente 5 mil millones de pesos, y esta época del año es muy importante en términos de la economía de las familias, en términos del bienestar de las familias”, expuso.
Ayer, la mandataria señaló que se llegó a una ocupación de 75 por ciento en los hospitales de la ciudad, es decir, mayor a la que se registró en mayo durante el pico más alto de la pandemia, por lo que aun cuando ha comenzado a disminuir la movilidad, se requiere de más apoyo de la ciudadanía.
Detalló que se recuperó y amplió en 260 camas la capacidad hospitalaria, de las cuales 222 se habilitaron en carpas, 96 en la unidad temporal del Ajusco Medio y 38 en interiores en Balbuena y Xoco.
La secretaria de Salud, Oliva López Arellano, aseguró por su parte que las carpas ya están funcionando desde este día (ayer) en los hospitales Enrique Cabrera, General de Tláhuac y Belisario Domínguez. “Todas tienen oxígeno disponible –no ventiladores invasivos– para pacientes con cuadros moderados o graves”.