La titular de la Secretaría de Gobernación (SG), Olga Sánchez Cordero, destacó que “estamos en camino de consolidar a México como un Estado centrado en el cumplimiento tangible de los derechos de la ciudadanía; esta visión sólo puede ser cumplida con la participación activa del Poder Judicial, bajo una visión de una justicia humanista y social”.
Al asistir ayer al informe anual de labores 2020 del presidente del Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje, Plácido Morales Vázquez, la funcionaria refirió que la democratización de los sindicatos es una de las principales transformaciones en la actual administración.
“Para la Cuarta Transformación de la vida pública de México, la ética, las libertades y la confianza son bases para la restructuración de nuestro país, por ello agradezco a este tribunal, a su presidente, a sus magistradas y magistrados que actúen bajo estos preceptos y con su trabajo se sumen a esta transformación de nuestro país. Que el Estado mexicano se distinga por sus acciones y no por sus discursos”, añadió.
Para eliminar la pobreza y garantizar la igualdad de oportunidades, insistió, es necesaria la justicia social y “no puede haber paz sin justicia, por ello la importancia de contar con instituciones profesionales que se encarguen de garantizar el acceso a ella de manera pronta, gratuita e imparcial, como lo hace este tribunal”.
Por su parte, el magistrado presidente del Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje, Plácido Morales Vázquez, al rendir su informe señaló que a pesar de vivir un año complejo por la emergencia sanitaria por el Covid-19, la Cuarta Transformación tiene como pilar fundamental la justicia social y el respeto a los derechos humanos. Refirió que, para la institución que encabeza, ha sido un año trascendental por la implementación de la reforma en materia de justicia laboral que es “la más grande en México desde la promulgación de la Constitución de 1917”.