Los grandes tumultos no sólo se concentran en el Centro Histórico, también en los alrededores del mercado Sonora, donde se han colocado puestos ambulantes de venta de artículos navideños que atraen a decenas de visitantes, en medio de la alerta que vive la Ciudad de México por la pandemia de Covid-19.
Desde el puente peatonal de avenida Fray Servando, en la demarcación de Venustiano Carranza, se aprecian decenas de carpas amarillas que ocultan el tránsito de miles de personas entre puestos de esferas, gorros, guirnaldas, árboles de Navidad, luces, artículos decorativos y ropa, propios de una romería, las cuales son autorizadas por las alcaldías, ante las cuales se debe realizar el trámite correspondiente.
Con la declaración de alerta sanitaria por el nuevo coronavirus, el gobierno capitalino anunció la cancelación de las romerías tradicionales de la época decembrina.
Por ese laberinto, donde no hay personal que entregue gel antibacterial o solicite a la gente usar cubrebocas, cruzan coches y motonetas que no permiten que la gente se distribuya por el espacio, de por sí ya reducido.
Los puestos ambulantes se colocan desde las 5 de la mañana y se levantan poco después de las 2 de la tarde; sin embargo, aunque sus artículos ya están en bolsas, no pierden la oportunidad de venderlos, en una temporada que la consideran comercialmente importante para ellos.
En tanto, como parte de las labores para reducir el tránsito de vehículos en el Centro Histórico, autoridades del Gobierno de la Ciudad de México instalaron vallas metálicas en las calles como Meave y Vizcaínas para facilitar la circulación peatonal.
Entre las calles que se pretenden cerrar están Izazaga –de 20 de noviembre a Circunvalación–, Circunvalación –de San Pablo a Lecumberri–, Emilio Zapata, Santo Tomás, Ramón Corona, Roldán, Misioneros, Jesús María, Topacio, Las Cruces, República de El Salvador y República de Uruguay.
Entre las medidas que se aplicarán a partir de mañana en el primer cuadro de la ciudad se encuentra el cierre de tiendas y comercios no esenciales a las 17 horas de lunes a sábado, así como cierre alternado domingos y sábados.
Se realizará un ordenamiento alternado del comercio en vía pública que deberá retirarse a las 16 horas los días de operación.
Asimismo, se aplicarán filtros de dosificación de personas en calles de alta afluencia y en entradas y salidas, y el fortalecimiento de campañas de publicidad para el uso de cubrebocas y medidas sanitarias.