Río de Janeiro. Brasil superó este sábado los 181 mil 123 fallecidos por Covid-19 y llegó a seis millones 880 mil 127 casos tras registrar 686 defunciones y 43 mil 900 contagios en las últimas 24 horas, informó hoy el gobierno.
El país, es el segundo del mundo con más muertes causadas por coronavirus, sólo detrás de Estados Unidos, y el tercero en el número de casos, superado por Estados Unidos e India.
Luego de reducir las curvas de casos y muertes en septiembre, la nación sudamericana registró un aumento de ambas estadísticas desde noviembre, ante lo cual muchos especialistas consideraron que el país experimenta una segunda ola de la pandemia.
Según los datos del Consorcio de Medios de Prensa, el promedio móvil de muertes hasta el viernes fue de 639 por día durante la última semana, 25 por ciento más que en los 14 días anteriores.
En 20 de los 27 estados de Brasil se registró un aumento de las muertes causadas por la Covid-19.
El promedio móvil de casos durante la última semana hasta el 11 de diciembre fue de 43 mil 052, 27 por ciento más que en los 14 días anteriores.
Sao Paulo, el estado más poblado de Brasil, es también el más afectado, con un millón 333 mil 63 casos y 43 mil 971 fallecidos, seguido de Río de Janeiro, con 388 mil 431 registros y 23 mil 718 óbitos.
Debido al aumento de casos en las últimas semanas, el sistema sanitario comenzó a estar al límite de su capacidad en muchas ciudades del país, entre ellas las dos más pobladas, Sao Paulo y Río de Janeiro.
El aumento de casos provocó que varios gobiernos regionales volvieran a aplicar medidas de restricción.
En Mato Grosso do Sul (centro-oeste), el gobierno decretó el toque de queda a partir de este próximo lunes durante 15 días, con lo cual quedó prohibido a la población salir de casa de las 22:00 a las 05:00 horas.
En Sao Paulo, el gobierno redujo el horario de bares y restaurantes y amplió el de los centros comerciales para evitar aglomeraciones.
En Río de Janeiro, la ciudad más turística del país, la alcaldía prohibió aparcar en la playa los fines de semana y días festivos, se cerraron las áreas de ocio de las playas y principales parques y el uso de las áreas comunes en los edificios, como saunas y piscinas.
Además permitió que los centros comerciales abran las 24 horas para evitar aglomeraciones.
Por su parte, el gobierno sigue negociando la compra de vacunas contra el Covid-19 con las farmacéuticas que las desarrollan.