“No tenemos nada que celebrar, no conocemos los derechos humanos”, aseguraron otomíes residentes en la Ciudad de México, en el contexto del Día Internacional de los Derechos Humanos.
A casi dos meses de la toma del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), acusaron que los funcionarios federales y locales están “simulando mesas de diálogo, pues envían a funcionarios que llevan papeles a sus jefes. Queremos personas que tomen decisiones”.
Exigieron que a la próxima sesión de diálogo asista la secretaria de Salud capitalina, Oliva López Arellano. Diego García Bautista, de la Uprez BJ, indicó que pretenden ser derechohabientes del IMSS y precisó que López Arellano es quien debe gestionarlo. En conferencia de prensa anunciaron también que, partir de hoy y hasta el 13 de diciembre, realizarán la Expoventa de artesanías, mezcal y café, la cual será surtida con productos y piezas artesanales hallados en el INPI.
Criticaron que la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, “no tenga cinco minutos” para ir a la toma, pero sí disponga de tiempo para reunirse con empresarios.
García Bautista denunció que las autoridades buscan “dividir” a la comunidad y se les está ofreciendo “25 mil pesos” para deslindarse de la toma del INPI y del movimiento en general, lo cual, aludió, los dejaría sin derecho a vivienda, una vez que se hayan expropiado los cuatro terrenos demandados, aunque en este tema falta que les resuelvan dónde residirán mientras les construyen las viviendas, por lo que consideró que la ocupación del organismo federal “va para largo”.
