El director del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), Juan Antonio Ferrer Aguilar, sostuvo que el país esta preparado para enfrentar en esta época invernal la sindemia de Covid-19 e influenza, ya que se hay medicamentos suficientes.

Al comparecer ante la Comisión de Salud del Senado, precisó que en el caso del Covid-19 se adquirieron 4 millones de fármacos específicos para la atención moderada y grave de ese virus, que resultó el desafío de salud más importante en 100 años.

Se trata, precisó, de sedantes, relajantes musculares, vasopresores y antinflamatorios, entre otros.

Ante las críticas de legisladoras del PAN, en especial de Martha Márquez, quien amenazó con demandarlo por haberse “robado” los recursos del Seguro Popular, Ferrer Aguilar respondió: “tendrá que demandarme a mí y a las 32 entidades de la República, a las que se transfirieron los recursos para comprar medicamentos y contratar personal”.

Expuso que el Insabi compró 5 mil 200 ventiladores, por un monto de 4 mil millones de pesos, los cuales se suministraron a los 32 estados, además de que se contrataron 18 mil 886 trabajadores, destinados a la atención exclusiva del Covid-19.

Además, dijo, se adquirieron 603 mil sets de diagnóstico de laboratorio PCR para un adecuado control epidemiológico.

En el encuentro, presidido por Miguel Ángel Navarro (Morena), el titular del Insabi anunció que para 2021 se regularizará a más de 17 mil trabajadores, quienes contarán con base y todas las prestaciones, y se contratará a otros 7 mil 100 para los centros de salud, que hoy están cubiertos por personal que realizaba servicio social.

Regularizarán a 80 mil trabajadores del sector

Destacó que“ después de todos los acercamientos posibles con la Secretaría de Hacienda, nos autorizó este número de plazas, y para 2024 más de 80 mil trabajadores de salud habrán sido regularizados”.

Ante el reclamo de la panista Alejandra Reynoso sobre la escasez de medicinas en el sector salud, Ferrer Aguilar rechazó que haya desabasto. Explicó que al inicio de la pandemia los insumos comenzaron a escasear en todo el mundo, porque parte del personal de los grandes laboratorios tuvo que confinarse en su casa.

Sin embargo, la cancillería ordenó a las embajadas mexicanas que buscaran los fármacos, “gracias a lo cual los tenemos todos y no hemos padecido desabasto”.

Subrayó que el sector salud “se siente satisfecho de que, en todo momento, incluso en el más crítico de la pandemia, se contó con la capacidad humana y de camas hospitalarias para atender a la población”.