De acuerdo con un estudio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) elaborado en el marco de la actual emergencia sanitaria, uno de los principales retos del teletrabajo es la separación del horario laboral y el personal, lo cual afecta tanto a directivos como a empleados.
Por lo mismo, la organización convoca a renovar la visión de metas para enfocarse más en resultados y no en el número de horas laboradas, así como asegurarse que empleados y directivos estén capacitados en esta modalidad.
En comparación con el teletrabajo ocasional en circunstancias normales, durante la pandemia su característica es que se volvió obligatorio en lugar de voluntario y de tiempo completo, lo cual puede desdibujar la frontera entre las obligaciones laborales y el horario personal.
En el informe El teletrabajo durante la pandemia de Covid-19 y después de ella, la organización dependiente de Naciones Unidas subraya que para ejecutar las actividades laborales las empresas deben asegurarse no sólo de que los trabajadores cuenten con las herramientas necesarias, sino también que estén capacitados para hacerlas desde casa, a lo cual no escapan los directivos, quienes también deben prepararse y puedan encabezar equipos a distancia.
“Las personas con hijos encuentran particularmente difícil la combinación del cierre de escuelas y guarderías con el teletrabajo prolongado y de tiempo completo. En una encuesta reciente, más de una de cada cinco personas (22 por ciento) que viven con niños pequeños (menores de 12 años) informaron que tienen dificultades para concentrarse en su trabajo todo el tiempo o la mayor parte del mismo”, se advierte en el documento.
La Asociación Internet MX reveló que con base en una encuesta aplicada este año, las madres trabajadoras son quienes reportan mayor carga con el home office.
Más de 70 por ciento de los encuestados por la asociación y la empresa OCC Mundial afirmaron ser más productivos en casa, vivir una reducción en los niveles de estrés y mejorar sus horas de sueño diario. Pero las estadísticas se revierten en el caso de las mujeres de 30 a 39 años, pues 62 por ciento “dijeron sentir mucha y muchísima carga de trabajo” con esta modalidad.
La OIT recalcó que pese a la reapertura de empresas, el avance incierto de los procesos de vacunación y los rebrotes el teletrabajo se mantendrá con altos índices. En otro documento elaborado por la organización, disponible en su página de Internet, también se ofrecen mecanismos para que las empresas aprendan a medir la productividad de los trabajadores fuera de las oficinas.