En un lapso de menos de un año, la cantidad de cuerpos sin identificar en los servicios forenses de todo el país tuvo un alza de 30 por ciento, aumento “brusco” que se debe al hallazgo recurrente de nuevos cadáveres no identificados, pero también al “colapso” en el que se encuentran las morgues por la falta de recursos humanos y financieros.
Así lo reveló un estudio elaborado por el Movimiento Nacional por Nuestros Desaparecidos en México (Mnndm), el cual señaló que para superar esta situación, el país necesita de un mecanismo extraordinario de identificación forense que le dé certeza a miles de familias sobre el destino de sus seres queridos.
En una investigación elaborada con base en datos oficiales de todos los servicios médicos forenses de la República, obtenidos a través de solicitudes de información, se logró documentar que en México existen por lo menos 50 mil 505 cuerpos no identificados, con números actualizados al 31 de agosto de 2020.
El Mnndm destacó que esa cifra es 30 por ciento más alta a la reportada por las autoridades forenses en diciembre de 2019, que fue de 38 mil 891 cuerpos no identificados.
De acuerdo con la organización civil, el “brusco aumento” se debe a dos factores principales: el recurrente hallazgo de personas fallecidas no identificadas y el “colapso” de los servicios forenses del país, generado por la insuficiencia de recursos humanos, técnicos y financieros, y la falta de prácticas homologadas de registro de información.
Lo anterior, subrayó el colectivo, ha conducido a que no exista un banco nacional de datos forenses ni un registro de personas fallecidas no identificadas y no reclamadas.
Luego de advertir que la cifra real de cuerpos sin identificar probablemente sea mayor de lo que admiten las autoridades, debido al carácter incompleto y rezagado de sus registros, el Mnndm consideró que ante este escenario “México más que nunca necesita un mecanismo extraordinario de identificación forense (MEIF)”.
Sólo un esfuerzo extraordinario de este tipo, recalcó, podrá permitir a las familias de personas desaparecidas tener certeza sobre el destino final de sus seres queridos, comenzar a cerrar la herida abierta por su ausencia e impulsar los procesos que lleven a la verdad y a la justicia.
En ese contexto, el organismo civil afirmó que para crear un MEIF “a la altura del desafío” que existe en México se necesita el compromiso explícito de todas las fiscalías del país de darle al mecanismo acceso irrestricto a los cuerpos no identificados y a todos los registros existentes para poder cumplir su mandato.
Asimismo, se requiere un presupuesto suficiente para que en 2021 el MEIF “pueda comenzar a operar”, el apoyo de la cooperación internacional para incrementar las capacidades propias que desarrollen el mecanismo, y que garantice autonomía real para que este órgano esté libre de toda influencia.