Nueva York., El ex funcionario mexicano Genaro García Luna se presentó este lunes –vía teleconferencia– en una breve audiencia ante un tribunal federal como parte del proceso de preparación de un eventual juicio, donde se reveló que ha estado en aislamiento bajo cuarentena en el centro de detención y, por lo tanto, no ha podido revisar pruebas en su contra con su abogado César de Castro, por lo que se postergó una serie de decisiones sobre su caso durante un par de meses.
En la audiencia preparativa para su juicio en el tribunal del distrito este de Nueva York ante el juez federal Brian Cogan –la misma corte y juez del caso de Joaquín El Chapo Guzmán–, el abogado defensor César de Castro informó que no ha podido hablar con su cliente desde el 20 de octubre y que la Oficina Federal de Prisiones ha cancelado sin explicación tres visitas.
Agregó que García Luna ha pasado 40 días aislado y en cuarentena de manera preventiva, y por todo ello no ha podido ver las pruebas que la fiscalía ha compartido con el acusado como es la norma en estos casos.
En la audiencia, realizada por teleconferencia debido a las condiciones de la pandemia, el juez Cogan solicitó que los fiscales en el caso busquen cómo resolver, junto con la defensa, el problema de acceso a los documentos de pruebas para el acusado.
A la vez, se postergó por tres semanas la decisión sobre la solicitud de los fiscales de mantener secretos por un plazo de 90 días algunas de las pruebas y otros materiales que han sido preparados para el caso, incluyendo comunicaciones grabadas, fotos y documentos relacionados a bienes y finanzas. Argumentan que compartirlos con la defensa y el público en este momento podría poner en riesgo a testigos que están cooperando con el gobierno de Estados Unidos.
De Castro indicó que presentará una objeción a esta solicitud, pero que requiere de tiempo para consultarlo con su cliente. El juez le concedió tres semanas, mientras tanto mantendrá sellados dichos documentos.
El juez Cogan concluyó la sesión citando a las partes para el próximo 17 de febrero.
García Luna está acusado de que entre 2001 y 2005, cuando encabezaba la extinta Agencia Federal de Investigación, y de 2006 a 2012, como secretario de Seguridad Pública, aceptó “millones de dólares en sobornos del cártel de Sinaloa a cambio de otorgar protección para sus actividades de tráfico de drogas”. El caso ahora incorpora a dos de sus ex subordinados, Luis Cárdenas Palomino y Ramón Pequeño García, quienes son calificados como prófugos de la justicia de Estados Unidos.
García Luna fue arrestado en Dallas por agentes federales el 9 de diciembre de 2019 y está encarcelado en Nueva York en espera de su juicio.
La pandemia ha contagiado a un creciente número de reos en los centros de detención del país, incluyendo en Nueva York.