Diversas organizaciones comenzaron ayer una misión civil de observación en Chiapas con el fin de documentar situaciones denunciadas por ciudadanos como “violaciones a los derechos humanos”.
Como parte de esta acción, que termina el 10 de diciembre, recorrerán varias comunidades del estado ubicadas en los municipios de Chilón, Chalchihuitán, Aldama y Tonalá. En un comunicado, expresaron que Chiapas “vive una situación de graves violaciones a las garantías civiles y agresiones contra personas y organizaciones que trabajan en la defensa de las causas sociales y por la paz”.
En este sentido, mencionaron a los centros de derechos humanos Fray Bartolomé de las Casas, Digna Ochoa y Miguel Agustín Pro Juárez. Además, al Comité Fr. Pedro Lorenzo de la Nada, Voces Mesoamericanas, así como a Acción con Pueblos Migrantes, Centro de Derechos de la Mujer de Chiapas, en representación de la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos Todos los Derechos para Todas y Todos.
La agrupaciones están acompañadas de forma paralela por el Servicio Internacional para la Paz (Sipaz), Servicios y Asesoría para la Paz (Serapaz), el Movimiento Sueco por la Reconciliación (SweFOR) y el Colectivo de Observación y Monitoreo del Sureste.
Las organizaciones manifestaron que ven con preocupación “el incremento de situaciones que criminalizan, hostigan y amenazan a personas y grupos defensores de derechos humanos, lo que queda ejemplificado en las difamaciones públicas contra el Centro de Derechos Humanos Digna Ochoa, que han ido en aumento.
De igual manera, indicaron, está “la continuidad de las agresiones armadas contra el pueblo maya tzotzil en el municipio de Aldama”.
Destacaron que esta grave crisis de desplazamiento forzado que se ha vivido por años , y en la quela ayuda humanitaria externa es esencial, se ha agravado debido a la pandemia de Covid-19 y a la dificultad de acceder a recursos básicos de salud y educación.