Ciudad de México. El Movimiento Campesino Plan de Ayala Siglo XXI urgió “definición y nombramientos” en el Tribunal Superior Agrario y los unitarios agrarios. Expuso que desde el mes de abril de 2019, el pleno se ha constituido sólo con tres magistrados numerarios (dos mujeres y un hombre) de los cinco que se requieren y una magistrada supernumeraria.
A esta situación, añadió, “debemos agregar que el 1° de noviembre de este año, una de las dos magistradas numerarias solicitó licencia por seis meses misma que le fue otorgada, por lo que el pleno del Tribunal Superior Agrario quedó reducido para su integración a dos magistrados numerarios”.
Recordó que desde su origen, el Tribunal funciona como órgano colegiado, integrado por cinco magistrados numerarios y un supernumerario, que suple la ausencia de uno de aquellos, y tiene entre sus diversas tareas, ser competentes para resolver los expedientes de tierras del rezago derivado de la reforma constitucional, además la de ser órgano de segunda instancia en los casos que entrañen los derechos colectivos de los núcleos agrarios, a través del recurso de revisión de las sentencias de los tribunales unitarios.
Indicó que la problemática para la debida integración del pleno “se ve amenazada si consideramos que el actual magistrado presidente y la magistrada supernumeraria pronto dejarán sus encargos por edad”.
Esta situación, expuso, “genera riesgos en la integración del quórum legal para que pueda funcionar”, que requiere un mínimo de tres magistrados para la validez de sus acuerdos y resoluciones, en el caso de que un magistrado o magistrada se enferme o se excuse de conocer de un asunto, lo que impediría la realización de sesiones plenarias.
Por otra parte, dicho movimiento recordó que la Ley Orgánica de los Tribunales Agrarios previene que el nombramiento de los magistrados durará seis años, después de los cuales para que puedan continuar en el ejercicio deberán ser ratificados conforme al procedimiento de su designación.
“A la fecha existen magistrados unitarios que ya cumplieron el período de su designación, sin que se haya resuelto sobre si son o no ratificados; asimismo, existen algunas vacantes de magistrados unitarios que requieren se cubran”, agregó.
Ante este panorama, consideró “importante y necesario que los candidatos a magistrados deben contar con los conocimientos teóricos probados y reconocida trayectoria y experiencia en cuanto al derecho social agrario. Contar con solvencia moral y ética a fin de garantizar que su quehacer personal y profesional certifique una conducta intachable como impartidores de justicia en tan sensible área. Y en el caso de que actualmente funjan como magistrados unitarios, no tengan antecedentes o quejas por violaciones a leyes o procedimientos en su tarea de impartición de justicia”.
Demandó “compromiso institucional en las entidades de la República; por ello, resultan impostergables dichas designaciones; que redundaran no solamente en la integración de dicho órgano colegiado, sino en la paz y la tranquilidad para los justiciables quienes deben ser atendidos de forma pronta y expedita”.