Londres. La plataforma estadunidense Netflix rechazó una petición del secretario de Cultura británico, Oliver Dowden, para agregar avisos al inicio de los episodios de su exitosa serie La corona (The Crown) para aclarar que se trata de una obra de ficción, informaron ayer varios medios de Gran Bretaña.
Dowden es una de las figuras destacadas del Reino Unido que dicen que la serie, en la que los actores interpretan a miembros de la familia real, crea el riesgo de que los espectadores se formen una impresión errónea y dañina de la realeza.
Una fuente del gobierno señaló que Dowden escribió a la compañía para decir que la serie era “un drama bellamente producido y actuado, pero Netflix debería dejar muy claro que es una obra de ficción”.
La plataforma no respondió de inmediato a un correo electrónico de Reuters en el que se solicitaba su postura.
“Siempre hemos presentado a La corona como un drama y tenemos toda la confianza en que nuestros miembros entienden que es una obra de ficción que se basa mayormente en hechos históricos”, respondió la compañía, según los reportes de medios británicos.
“Como resultado, no tenemos planes y no vemos la necesidad de agregar un aviso.”
Si bien muchos espectadores británicos han disfrutado viendo La corona, la temporada más reciente ha atraído críticas de algunos analistas por escenas que sugieren que la difunta princesa Diana fue tratada con frialdad, incluso con crueldad, por miembros de alto rango de la realeza.
El columnista Simon Jenkins del periódico The Guardian acusó a la cuarta temporada de haber “elevado el embuste y la ofensa”. Agregó que la licencia artística no puede justificar las mentiras que muestran a personas vivas o recientemente muertas de la peor manera posible.