El presidente Andrés Manuel López Obrador informó que inició la segunda etapa de su gobierno, que incluye terminar en dos años, o a más tardar a finales de 2024, obras inconclusas o abandonadas en administraciones anteriores, y aseguró que no se comprometerá a “más de lo que no se va a poder cumplir”.
De gira por Sinaloa –donde resaltó que con el gobernador priísta Quirino Ordaz “no hay pleitos” ni diferencias–, sostuvo que se dará continuidad a la política que permitió sentar en los primeros dos años de gobierno las bases de la transformación, con la aplicación de la fórmula “cero corrupción, cero desperdicio o gasto superfluo, y todo lo que se ahorre se utilice para el desarrollo del país”.
Esta forma de gobernar “está acreditada, ya no tenemos que hacer ningún cambio, ya sabemos qué se necesita para sacar adelante a nuestro pueblo y al país”, resaltó, al recordar que por esta medida “cobramos adeudos fiscales atrasados por 750 mil millones de pesos”.
Remarcó que no se requiere aumentar impuestos ni endeudar al país, ni por la crisis que generó la pandemia de Covid-19, porque “lo conseguido por no permitir la corrupción y el derroche se aplicó para ayudar a la gente de abajo”, y se complementó con la llegada de remesas.
Teletón
Previamente, en un videomensaje, anticipó que firmará, como única excepción, un convenio con Teletón para que menores con discapacidad que reciben apoyo del gobierno –hasta ahora un millón– reciban terapia en alguno de sus centros.
Desde la presa Picachos, en Concordia, Sinaloa, que terminó de construirse en 2011, aunque sin canales de riego, el mandatario ayer se comprometió a concluir esta obra antes de 2024, con el fin de que se produzca en México “lo que consumimos y no depender del extranjero”. Manifestó que se realizará labor de convencimiento entre ejidatarios y productores sobre los beneficios.
Acompañado de su esposa, Beatriz Gutiérrez, el Presidente inauguró el acueducto Picachos y activó el sistema de bombeo de la planta potabilizadora de Miravalles para suministrar de agua a Mazatlán. Y ofreció a construir otro acueducto para que Concordia también cuente con el líquido, porque es una “paradoja” que, pese a tener el embalse, carece de agua.
Subrayó que la supervisión de obras que realiza es para cumplir la segunda de tres etapas de su gobierno, tras resaltar que “estamos ahorrando porque ya no hay robo de gasolinas, sobornos y no se cobran obras hasta en cinco veces más su valor real”.
Como ejemplo mencionó el ahorro de 225 mil millones de pesos por la cancelación del aeropuerto en Texcoco, al pasar de 300 mil millones de pesos estimados a 75 mil millones con la construcción del aeropuerto Felipe Ángeles en la Base Militar de Santa Lucía, estado de México.
Subrayó que no dejará obras inconclusas a futuros gobiernos, como a él le heredaron –dijo– cientos de hospitales, escuelas, caminos, presas, trenes y mucho más.
“Tenemos que portarnos bien”
Más tarde, junto al secretario de Comunicaciones y Transportes, Jorge Arganis, supervisó el avance del camino San Ignacio-Tayoltita –que concluirá en 2022–, en las sierras de Sinaloa y Durango, de difícil acceso y marginación “de los beneficios del desarrollo”, porque, recordó, Tlayoltita es de los pueblos mineros más importantes de México.
“Hay una minera extranjera que tiene con nosotros un juicio pendiente porque se niega a pagar impuestos, pero ya lo estamos atendiendo. Ahora todos tenemos que portarnos bien.”
El gobernador Ordaz resaltó el trabajo del Presidente. “Dije que nos iba a ir a toda madre con usted y así estamos viendo los sinaloenses”. A su vez, López Obrador comentó que el gobernador “gobierna con pasión, con ganas” y remarcó que para gobernar “se requieren las tres c: cabeza, corazón y carácter, pensando siempre en los demás”.
Le ofreció apoyo para cancelar la planta de tratamiento de aguas negras de Mazatlán, en beneficio del desarrollo turístico y “la recreación” del pueblo.
Rumbo a San Ignacio, el Presidente constató en la escuela Rosa Nevarez, de la comunidad el Lodazal, los trabajos realizados con los recursos del programa La Escuela es Nuestra.
