Después de una racha alcista de cinco meses consecutivos, la confianza de los consumidores mexicanos en la situación económica del país y la de sus hogares disminuyó en noviembre, en la medida de que fueron en aumento los casos de Covid-19, de acuerdo con información publicada este viernes por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

El Indicador de Confianza del Consumidor (ICC) mermó en noviembre un punto en comparación con octubre, mientras la medición cayó 6.7 puntos frente al mismo periodo del año pasado, reportó el Inegi.

El ICC permite conocer la percepción actual y a futuro que tiene la población sobre la situación económica de su familia y del país y sus posibilidades de compra de bienes duraderos.

Todos los componentes resultaron negativos. La situación económica de los miembros del hogar en el momento actual, comparada con la que tenían hace 12 meses, se redujo 1.5 puntos respecto a octubre, mientras en comparación con noviembre del año pasado cayó 9.6 por ciento.

Las expectativas de la población en México para los siguientes meses también cayó 1.5 puntos frente al mes anterior inmediato y sólo disminuyó 2.9 puntos respecto al mismo periodo de 2019.

La situación económica del país hoy en día, comparada con la de hace 12 meses disminuyó 0.3 puntos , aunque en su comparación anual se contrajo 10.6 puntos.

Las posibilidades en el momento actual de los integrantes del hogar, comparadas con las de hace un año para realizar compras de muebles, televisor, lavadora y otros aparatos electrodomésticos, sólo mermó 0.1 puntos, pero en comparación con el mismo mes del año pasado se cayó 6.9 puntos.

Julio Santaella, presidente del Inegi, resaltó que después de cinco meses de avances mensuales, el indicador disminuyó en noviembre.

Analistas de Monex señalaron que la medición presenta un estancamiento, pues la confianza no parece poder regresar a los niveles sorprendentemente altos vistos entre julio de 2018 y marzo de 2020, es decir, después de las elecciones en las que resultó ganador Andrés Manuel López Obrador y el mes previo al inicio del confinamiento para enfrentar la pandemia.

Destacaron que si bien el nivel absoluto de la confianza es poco indicativo, los cambios de tendencia tienen una relación más estrecha con la economía real, por lo que el resultado adelanta los primeros efectos negativos del alza en el contagio de Covid-19.

La confianza parece ser inconsistente con los niveles del consumo observados en ese periodo de tiempo, pues las ventas de El Buen Fin crecieron 20 por ciento. Es posible que la población perciba que la mejora será lenta en los siguientes 12 meses, agregaron.

El Centro de Estudios de la Finanzas Públicas destacó que a pesar de la reducción, el índice mantiene una tendencia al alza, que inició desde mayo, ante la recuperación de empleo, una postura monetaria acomodaticia por parte del Banco de México, la llegada de remesas familiares y la reactivación de la actividad económica observada a partir de junio.

Analistas de Ve Por Más señalaron que la confianza se “enfermó” en noviembre como un reflejo de la aceleración de contagios. Comentaron que en un entorno de incertidumbre por la evolución de la pandemia y el bajo nivel de empleo, el consumo mejoraría lentamente en los meses subsecuentes.