Ciudad de México. México se mantiene como “uno de los destinos más atractivos” para la inversión extranjera directa (IED), prueba de ello es que en medio de la recesión económica por Covid-19 los flujos de capital foráneo han caído 6 por ciento, casi 8 veces menos que otras economías de la región, informó Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

Son varias las razones que pesan a favor del país “el tamaño de su economía, sus capacidades industriales instaladas, su cercanía al mercado de Estados Unidos y el que los trabajadores en el norte del país han desarrollado capacidades tecnológicas muy importantes”, explicó.

Además, en el entorno de una geografía económica que está llevando a las empresas a acercar su producción a los principales mercados internacionales, México es “el gran ganador” dada su vecindad con Estados Unidos y la puesta en marcha del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

De acuerdo con la Cepal, en los primeros tres trimestres del año, la IED en el país ha caído 6 por ciento respecto a 2019; mientras en Brasil lo ha hecho 45 por ciento, en Colombia 50 por ciento y en Chile 33 por ciento.

Bajo dicha perspectiva, Bárcena recalco que la región se mantiene por debajo del mundo en IED. Las estimaciones en 2020 apuntan a una caída de 40 por ciento en estos flujos a nivel mundial, mientras en América Latina y el Caribe la baja podría llegar hasta 55 por ciento, lo que la harían la más afecta en el mundo.

La secretaria ejecutiva de la Cepal puntualizó que hay un estancamiento de la IED desde la crisis financiera mundial, al revisar el ingreso de estos flujos de 1990 a 2019, a nivel mundial crecieron 3 por ciento, en las economías desarrolladas lo hicieron 5 por ciento, mientras en las economías en desarrollo cayeron 2 por ciento.

La coyuntura abre la puerta a mejorar la política de inversión en América Latina, dado que desde 2012 la IED ha caído ya sin el impulso que dieron en un inicio las materias primas, sólo el año pasado la merma alcanzó 7.8 por ciento anual, con bajas en 17 países y aumentos en nueve, recalcó.

El principal problema el próximo año va a ser el empleo y la inclusión social, “entonces necesitamos inversiones que realmente se apuntalen hacia allá, subrayó. Entre ellas recomendó la fabricación de insumos médicos, donde sólo México, Costa Rica y República Dominicana tienen presencia. “Los demás (países) no juegan”, advirtió Bárcena.

También pidió ponderar la inversión de calidad. “Sobre capitales foráneos que quieran ganancia rápida, la región debe tener una política clara al respecto”. “La Cepal vuelve a hacer un llamado para que las empresas nos ayuden a cambiar la estructura productiva porque ha demostrado mucho mayor concentración de riqueza, de ingreso, de desigualdad e insotenibilidad ambiental”, dijo.

Cambio profundo en México

En un balance sobre los dos años de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, Alicia Bárcena reconoció que “hay un cambio profundo” en México, sobre todo en la separación entre poder político y económico.

“Definitivamente, se ha intentado algo muy importante desde que en 1994 se vinculó el poder político con el poder económico y esa es la etapa neoliberal de México. Yo creo que en este momento hay un cambio desde López Obrador, de separar el poder político del poder económico y desde luego abordar una estrategia que muchos califican de poco convencional, pero yo creo que es muy interesante”, dijo Bárcena.

Entre lo positivo, mencionó el aumento al salario mínimo, el combate a la corrupción y políticas de austeridad, el apoyo a las familias más vulnerables la prioridad de inversión público.

“Cuando digo que México está priorizando la inversión, lo digo en serio. Es de los pocos países que está priorizando la inversión y está apuntalando a las familias más pobres”, lo que da un puente entre el crecimiento de corto y mediano plazo, manifestó.

Subrayó que sólo los anuncios en infraestructura que han lanzado el gobierno federal de la mano de la iniciativa privada muestran que “hay un gran clima de inversión” en el país.