Al grito de “¡hagan dos filas!, ¡pónganse el cubrebocas!, ¡eviten aglomeraciones!”, empresarios que tienen sus negocios en el Centro Histórico de la Ciudad de México iniciaron una cruzada para evitar que las autoridades se vean en la necesidad de cerrar los comercios los domingos.
Dependientes, propietarios y encargados de pequeños locales y grandes cadenas de ropa y comida, como Cuidado con el Perro, McDonald’s, Los Bisquets Obregón, Vips, negocios joyeros, de compra-venta de monedas antiguas y comida en pasajes como el Pimentel, tomaron la iniciativa de orientar al público que camina por la calle Madero para evitar aglomeraciones.
María Fernanda Islas, administradora del Pasaje Pimentel, informó que los comerciantes invertirán, tan sólo los domingos, alrededor de 6 mil pesos para pagar a 24 jóvenes que emplearán como anfitriones del Centro Histórico y quienes estarán encargados de evitar aglomeraciones en Eje Central Lázaro Cárdenas, Bolívar e Isabel la Católica en su cruce con Madero, por lo que invitaron a los 700 negocios, incluso los que se ubican en plantas altas, a unirse a la causa.
La labor de los pregoneros será indicar al público que porten correctamente el cubrebocas, a quien no lo traiga darle uno, distribuir gel y evitar amontonamientos, como los que se registran en Lázaro Cárdenas y Madero, por lo que una de sus tareas será separar a la gente en dos sentidos de ida y vuelta.
Con el apoyo de un megáfono, el dueño del restaurante Capital, Aldo Hernández, indicaba al público que formaran una fila.
La idea fue secundada por dueños de tiendas como Krispy Kreme, El Rey del Pavo y el restaurante vegetariano de Motolinía, “aunque las grandes como Bershka se muestran reacias a cooperar”.
En tanto, ambulantes y tarjeteros no cumplieron el acuerdo que tuvieron con autoridades locales de ofrecer mercancía y repartir volantes en calles donde se pactó no instalar puestos ante la emergencia sanitaria.
Calles como Corregidora y Correo Mayor estuvieron prácticamente vacías y sólo algunos grupos de personas se arremolinaron frente a diversos locales.
En Motolinía y 5 de Mayo, un joven fue detenido por policías al distribuir tarjetas; sin embargo, en la esquina con Tacuba una treintena de sus colegas lo hacía normalmente frente a las salidas de la estación del Metro Allende.
Ayer se informó que líderes y el gobierno formalizaron un acuerdo para retirar a 6 mil comerciantes en Corregidora, Correo Mayor, 20 de Noviembre, Motolinía, Tacuba, Madero, así como en República de Argentina, Brasil y Colombia.
