Teherán. El físico iraní Mohsen Fakhrizadeh, considerado por Occidente como el arquitecto del programa nuclear militar de la república islámica, fue asesinado ayer por un comando armado cuando viajaba en su vehículo en una carretera de la ciudad de Absard, 70 kilómetros al este de Teherán, un acto que podría escalar las tensiones en Medio Oriente.

Fakhrizadeh, director de la Organización de Investigación e Innovación del Ministerio de Defensa, fue emboscado con explosivos y fuego de ametralladora, y falleció más tarde en un hospital por las lesiones recibidas, informó el Ministerio de Defensa iraní. Su guardaespaldas y miembros de su familia, quienes intentaron salvarlo, también resultaron heridos, según reportes de la prensa local oficial.

Aunque ningún gobierno ni organización han reivindicado la autoría del asesinato, el canciller iraní, Mohamad Javad Zarif, tuiteó: “Esta cobardía, con serios indicios del papel de Israel, muestra un belicismo desesperado de los perpetradores”. Abdolrahim Musaví, jefe del ejército del país persa, aseguró que “se observa claramente la mano criminal de Estados Unidos y del régimen sionista”, reportó la agencia de noticias ISNA.

La muerte fue vista en Irán tan grave como el asesinato de Qasem Soleimani, comandante del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, perpetrado el pasado 3 de enero por las fuerzas estadunidenses. El deceso del militar provocó multitudinarias manifestaciones y una escalada de tensiones en la región.

Hosein Dehqan, asesor del líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, tuiteó que las autoridades iraníes “caerán como un rayo contra los asesinos del mártir Mohsen Fakhrizadeh”, y agregó que los autores “lamentarán lo que han hecho”.

Fakhrizadeh dirigió el programa Esperanza, considerado por Israel y Occidente como una operación militar que buscaba la viabilidad de construir un arma nuclear en Irán. Teherán ha mantenido durante mucho tiempo que su programa nuclear es pacífico.

El Organismo Internacional de Energía Atómica sostiene que Esperanza terminó en 2003. Los inspectores monitorean ahora los sitios nucleares en Irán como parte del acuerdo de ese país con las potencias mundiales de 2005.

El gobierno de Israel se negó a comentar de inmediato sobre la muerte de Fakhrizadeh, pero el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, lo nombró una vez durante una conferencia de prensa en 2018: “Recuerden ese nombre”.

En Estados Unidos, la Casa Blanca, el Pentágono, el Departamento de Estado y la Agencia Central de Inteligencia declinaron hacer comentarios. El presidente Donald Trump retuiteó información sobre el deceso, pero no dio su opinión.

Horas después, el encargado de la diplomacia estadunidense, Mike Pompeo, tuiteó que su gobierno impuso sanciones a dos empresas chinas y otras dos rusas por haber apoyado al desarrollo del programa nuclear iraní.

Israel enfrentará acusaciones de que utiliza las últimas semanas de la administración Trump para tratar de provocar a Irán con la esperanza de cerrar cualquier posibilidad de reconciliación entre Teherán y la administración entrante encabezada por Joe Biden, informó el diario británico The Guardian.