Ignacio Zamudio hace todo lo que está de su parte para que los marchistas no pierdan el ánimo “ni la esperanza de que esto (de la pandemia) pasará, porque son jóvenes que tienen mucho futuro y les hago entender que en la vida se presentan dificultades”.
Desde hace tres meses retomó las actividades con el equipo que tiene a su cargo en la Ciudad de México, algunos estaban en sus lugares de origen resguardados por el confinamiento que comenzó en marzo pasado cuando dejaron las instalaciones del Centro Nacional de Desarrollo de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento (CNAR), que aún se mantienen cerradas.
El entrenador de Alegna González, medallista mundial y clasificada en la prueba de 20 kilómetros a los Juegos Olímpicos de Tokio a celebrarse el próximo año, confiesa lo difícil que ha sido mantener con “optimismo” a sus alumnos en medio de pláticas, anécdotas, pelícu-las, videos y “poner de ejemplo a los deportistas con sus testimonios de vida”.
Como padre de familia entiende la situación que están atravesando porque, al fin jóvenes, “son muy inquietos, pero les doy esperanza (con sus reflexiones). A veces tenemos que poner un alto por lesiones, enfermedades o como esta pandemia (del Covid-19). Les digo que en la vida todo pasa”.
